Janssen apuesta por la multidisciplinariedad en el abordaje de las enfermedades inflamatorias mediadas por inmunidad

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Bajo el título ‘Impulsando juntos una nueva dimensión en inmunología’, Janssen ha celebrado el Simposio Nacional Innovara en el que ha reunido, por primera vez, a especialistas nacionales e internacionales de referencia de las tres disciplinas que tratan las enfermedades mediadas por la inmunidad (Dermatología, Gastroenterología y Reumatología). Durante este encuentro, cuyo objetivo ha sido profundizar en el manejo práctico y herramientas diagnósticas para mejorar la calidad de vida de estos pacientes, se ha puesto de manifiesto que la implantación de nuevas estrategias colaborativas sustentadas en las denominadas consultas multidisciplinares es cada vez más frecuente.

Y es que, estas tres especialidades han pasado de considerarse disciplinas estanco, que tomaban muchas veces decisiones unilaterales, a unas especialidades que necesitan colaborar, lo que ha implementado estas nuevas estrategias colaborativas. “El éxito de estas consultas prácticas hace pensar que en un futuro el abordaje de estos pacientes se realizará desde unidades perfectamente establecidas a través de las que se manejarán de forma integral a los pacientes compartidos actualmente”, explica el doctor José Luis Sánchez Carazo, jefe del Área de Psoriasis en Consorcio Hospital General Universitario de Valencia. “Es fundamental el abordaje integral; el tratamiento de todas las comorbilidades asociadas a las distintas patologías mediadas inmunológicamente mejora la supervivencia”, continúa este experto.

De hecho, en el tratamiento de la artritis psoriásica la relación entre Reumatología y Dermatología es ya muy estrecha y, recientemente, se está sumando también Gastroenterología, según afirma el doctor Juan D. Cañete, consultor senior de la Unidad de Artritis, Servicio de Reumatología del Hospital Clínic de Barcelona. “Hay que incentivar la interacción entre los distintos profesionales, la creación de unidades multidisciplinarias, etc., para mejorar el control integral del paciente. Creemos que va a aumentar de una forma importante la colaboración entre los diferentes especialistas que tratan la artritis psoriásica, lo que hará avanzar los conocimientos en patogenia, diagnóstico, evaluación de la actividad y en tratamiento y, en definitiva, permitirá un control integral y óptimo del paciente”.

Por su parte, el doctor Fernando Gomollón, jefe de la Unidad de Enfermedad Inflamatoria Intestinal del Hospital Clínico Lozano Blesa de Zaragoza, ha incidido en que no solo tratan a un paciente, sino también a su entorno. “No tratamos un intestino, tratamos un paciente. Si nuestra aproximación no es social, el fracaso es seguro. El éxito del tratamiento en la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII) se define por restaurar de tal forma la calidad de vida del paciente que la repercusión en su vida y su entorno sea mínima, casi indetectable. El reto más importante es, simplemente, coordinarnos bien”, recalca.

La efectividad de los tratamientos biológicos en enfermedades inmunológicas

En psoriasis
El PASI absoluto (Psoriasis Area and Severity Index -índice de gravedad y área de la psoriasis-), como explica el doctor Sánchez Carazo, se utiliza como criterio en práctica clínica para evaluar la eficacia a largo plazo de la terapia biológica y es la medida más importante en la evaluación de la mejora en la gravedad de la enfermedad. Respecto al éxito en el tratamiento de la psoriasis, desde la aparición de los fármacos biológicos los especialistas han definido el éxito terapéutico como la reducción del 75% del PASI en un plazo que oscila entre 12 y 16 semanas de iniciado el tratamiento y el mantenimiento de este índice, denominado PASI 75. “Los nuevos fármacos frente a IL-17 y frente a IL-23 son fármacos altamente eficaces que han demostrado hasta el momento un buen perfil de seguridad”.

En concreto, durante el simposio, se han aportado datos de supervivencia de ustekinumab, biológico desarrollado y comercializado por Janssen. “El fármaco ustekinumab es el que demostró una mayor tasa de retención (97,7%) frente al resto de fármacos biológicos”, ha explicado el doctor Sánchez Carazo, haciendo alusión a SAHARA, un estudio epidemiológico, prospectivo, realizado en 54 centros españoles durante los años 2013 y 2014 con más de 550 pacientes de psoriasis en tratamiento con fármacos biológicos para determinar la tasa de retención de los diferentes fármacos a dos años de tratamiento.

En Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII)
El doctor Gomollón ha explicado que las necesidades pasan por más investigación coordinada para conocer cómo interaccionan los diversos factores causales, ambientales y genéticos para producir los trastornos de la EII, que son muy variados. “En estos momentos todavía queda al menos una cuarta parte de los pacientes en los que no conseguimos alcanzar una situación clínica de remisión completa. Los tratamientos biológicos han supuesto un avance muy importante, pero quedan muchísimos retos por resolver. Ustekinumab es un fármaco eficaz y con un buen perfil de seguridad. Su principal ventaja reside en su diferencia: su mecanismo de acción es distinto. Por tanto, es muy probable que con el tiempo vayamos encontrando nichos de pacientes en los que sea la mejor alternativa. Un ejemplo práctico es el grupo de pacientes que sufre una reacción paradójica a los agentes anti-TNF y presenta graves lesiones cutáneas psoriasiformes. Ustekinumab ha demostrado que puede mejorar las lesiones cutáneas mientras mantiene el control de la enfermedad inflamatoria”, señala.

Asimismo, este especialista ha apuntado que ninguna enfermedad se puede entender sin una perspectiva evolutiva. “Los fenotipos que observamos son el resultado de complejas interacciones entre el genoma y el exposoma, interacciones que son dinámicas, además. Nuestra simple clasificación por órganos y sistemas es útil académicamente, pero la membrana sinovial, la dermis y el intestino son partes integradas de un metaorganismo del que forman parte trillones de bacterias, hongos, virus y arqueas. La psoriasis, la artritis psoriásica, la artritis reumatoide y la enfermedad de Crohn comparten algunos mecanismos comunes, que sólo podremos empezar a entender desde una perspectiva evolutiva”.

En artritis psoriásica
La artritis psoriásica suele asociarse a comorbilidades que son muy prevalentes en la población general: hipertensión, obesidad, intolerancia a la glucosa, dislipemia, etc. El éxito de un tratamiento para la artritis psoriásica se define por cómo consigue preservar la calidad de vida del paciente. Para ello, además de conseguir un control de la inflamación que mantiene la actividad de la artritis psoriásica, se deben prevenir o tratar todas las comorbilidades que pueda tener el paciente y que pueden desembocaren problemas cardiovasculares graves. Estas comorbilidades pueden condicionar el tipo de tratamiento para la artritis psoriásica.

Según la experiencia del doctor Cañete, ustekinumab es un fármaco eficaz en el tratamiento de las manifestaciones de la artritis psoriásica (piel, articulaciones, entesitis, dactilitis) así como en las manifestaciones extra-articulares como la enfermedad inflamatoria intestinal crónica (Crohn, Colitis ulcerosa). “El fármaco es eficaz, seguro y confortable con una administración trimestral. Es de gran valor para estos pacientes”.

Diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado inmediato, garantía de éxito
De acuerdo a los expertos, en todas las patologías mediadas inmunológicamente se ha demostrado que tanto el diagnóstico como el tratamiento correcto precoz mejora la enfermedad, minimiza las complicaciones, y aumenta la calidad de vida de los pacientes y su expectativa de vida.

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