Los entornos VUCA han sido denominados así por poseer características como la Volatilidad, Incertidumbre (uncertainty en inglés), Complejidad y Ambigüedad. Atributos todos que en realidad no pertenecen a un entorno específico, sino que se trata del lugar en el que se mueve la actividad comunicativa empresarial de nuestros tiempo de forma generalizada. A los profesionales de la Comunicación les resulta, por tanto, imprescindible conocer cómo desenvolverse en estos nuevos espacios.
Con ese ánimo fue convocada la Conferencia Internacional de Relaciones Públicas en Argentina, donde participó el presidente de la Global Alliance for Public Relations and Communications Management, José Manuel Velasco. Durante la jornada, Velasco habló de lo que se ha bautizado como ‘comunicación antifrágil’, es decir, fortalecer a las organizaciones apoyándose en activos intangibles.
Para José Manuel Velasco son cinco los fenómenos por los que las organizaciones necesitan llevar a cabo estrategias de comunicación ‘antifrágiles’: la mentira, la superficialidad, la prisa, la deshumanización y la confusión. Como si de pecados y virtudes se tratara, Velasco señaló que “la materia prima del profesional de la comunicación es la confianza. La comunicación antifrágil construye confianza” añadiendo que “contra la superficialidad, tenemos que ser profundos, generar conocimiento y compromiso”.
Durante su intervención, el también miembro asesor de la consultora Llorente & Cuenca, hizo referencia a un estudio que señala que el 87% de los profesionales de la comunicación consideran que el término ‘relaciones públicas’ ya no describe a su profesión. “Los profesionales de la comunicación debemos ser la conciencia crítica de las organizaciones”, lo que implica “ser gestores de espacios seguros para el diálogo con grupos de interés”, y para ello resulta indispensable establecer estrategias poniendo al receptor en el centro de la misma, asumiendo que la digitalización ha empoderado a los individuos.
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