El 60% de las personas con enfermedades crónicas sufren dolor crónico. Profesionales de la salud, representantes de las autoridades sanitarias, profesionales que tratan el dolor y responsables políticos, así como representantes de asociaciones de pacientes, han coincidido en el marco del Foro Impacto Social del Dolor (SIP por sus siglas en inglés), celebrado por primera vez en España, en que el dolor se encuentra infradiagnosticado e infratratado en muchos casos. Según los diferentes grupos de trabajo reunidos al efecto, resulta prioritario un abordaje integral, multidisciplinar y multidimensional que incluya también la atención psicosocial.
La Asociación Internacional para el Estudio del Dolor (IASP, por sus siglas en inglés) define el dolor como una experiencia sensorial, emocional y cognitiva. “Esta definición debería ampliarse e incluir al paciente y todo lo referido al impacto social del dolor esto es, a su entorno, tanto familiar como social, lo que también incluye a la administración sanitaria”, ha señalado el presidente de la Sociedad Española del Dolor (SED), el profesor Juan Antonio Micó, en la acto inaugural del encuentro, celebrado en el Ministerio de Sanidad.{wbamp-show start}
El Foro Impacto Social del Dolor, celebrado por primera vez en España, organizado por la SED, en representación de la Federación Europea del Dolor (EFIC), la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) y Pain Alliance Europe (PAE), y con la colaboración de Grünenthal, sigue la línea de trabajo de su homólogo europeo. Esta plataforma promueve reunir a todos aquellos profesionales implicados en la toma de decisiones relativas al dolor que mejoren la calidad de vida de los pacientes. Este foro ha congregado a representantes de destacadas asociaciones de pacientes como la Alianza General de Pacientes (AGP), Foro Español de Pacientes (FEP) y Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP). El objetivo ha sido abordar los retos a los que se enfrenta la atención a los pacientes con dolor, tanto agudo como crónico, para avanzar en la mejora de la calidad asistencial y su tratamiento en España.
En la inauguración del foro, la Directora de Salud Pública, Calidad e Innovación del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, Pilar Aparicio, ha puesto de manifiesto la importancia de la asistencia a los pacientes con dolor. “En cualquier encuesta nacional de salud, el dolor es uno de los problemas de salud de la población española”, ha destacado. La Directora de Salud Pública ha señalado que “responder al dolor es una de las estrategias principales de este Ministerio” y se trabaja desde el punto de vista de la calidad, la innovación y la equidad“ para que todos los ciudadanos tengan el mejor acceso al manejo de su dolor”.
El dolor afecta en la calidad de vida de las personas y, consecuentemente, repercute ampliamente sobre la sociedad en su conjunto. Mª Soledad García Penalta, miembro de la Junta Directiva de la Alianza Europea del Dolor (PAE, por sus siglas en inglés), ha hecho hincapié en la necesidad de “identificar y solventar las deficiencias en el manejo del dolor crónico, ya que los pacientes se quejan del largo periodo de tiempo de espera para el diagnóstico y del dolor persistente a pesar del tratamiento, lo que afecta a su capacidad laboral y sus relaciones sociofamiliares. También ha destacado la importancia de analizar el impacto del dolor en España, al afectar a aproximadamente el 17% de la población, concienciando así sobre el peso que tiene en nuestra sociedad, salud y sistema económico. Más de un 90% de los pacientes han acudido a un profesional a causa de su dolor, tal y como se ha expuesto en el grupo de trabajo sobre el dolor como indicador asistencial, uno de los tres grupos de trabajo organizados en el marco del foro.
Un papel activo del paciente en el manejo del dolor
Entre las principales conclusiones alcanzadas en los diferentes grupos de trabajo desarrollados en el foro, los expertos han coincidido en que es necesario mejorar la calidad asistencial, para mejorar los resultados sobre los pacientes. Por ello, se requiere evaluar las expectativas del paciente, qué resultado quiere obtener y, desde ahí, definir las actuaciones para mejorar su situación clínica y social de manera integral.
Definir el umbral del dolor es prioritario para su tratamiento. Por ello, Carlos Mur, miembro de la junta directiva de SEDISA y coordinador del grupo de trabajo encargado de discutir la coordinación y continuidad asistencial. En este sentido, ha recordado que es necesario continuar con el desarrollo de “mejores indicadores” para permitir su abordaje desde la ciencia y la praxis.
“El dolor es de todos, de los profesionales, pacientes y cuidadores, así como de las asociaciones de pacientes”, ha advertido el representante de SEDISA. El paciente adquiere, así, un papel protagonista en el manejo del dolor empoderando su figura a través de su participación en la elaboración de los planes de atención al dolor incluyendo su experiencia en los criterios de valoración, tal y como se ha recogido en las conclusiones. “Emerge de esta jornada el concepto de paciente actiente, dentro de un modelo de atención afectivo-efectivo en el cual los pacientes y su entorno son copartícipes del proceso de atención del dolor crónico tomado decisiones de forma proactiva e incorporando medidas más allá de la prescripción farmacológica”, ha recalcado Mur.
Los diferentes grupos de trabajo constituidos han destacado la necesidad de tener muy en cuenta la atención a los pacientes con dolor como elemento prioritario y transversal en el marco de las estrategias y políticas de salud nacionales para garantizar la equidad y eficiencia de la atención a estos pacientes, contribuyendo así a la mejora de su calidad de vida. En este sentido, la representante de la Alianza Europea del Dolor ha subrayado que la optimización de la gestión de dolor proporcionaría beneficios económicos y sociales sustanciales: un uso más eficiente de los recursos existentes, menor absentismo, una mayor productividad y una menor carga sobre los presupuestos de la Seguridad Social.
Acerca del SIP
El marco científico de SIP España se encuentra bajo la responsabilidad de la Sociedad Española del Dolor (SED), como miembro de la EFIC. Los colaboradores son la Alianza Europea de Pacientes (Pain Alliance Europe (PAE)) en representación de los pacientes, la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) y la compañía farmacéutica Grünenthal como responsable de la financiación y el soporte no financiero (p.e. soporte logístico). El evento cuenta con la participación de Red de Ciudadanos Activos (Active Citizenship Network (ACN).