El sector del taxi sigue levantado contra las VTC en una huelga indefinida que no tiene visos de terminar próximamente. Cabe destacar el sentido bélico que han dado sus responsables a una lucha que ellos mismos han denominado ‘guerra’ al tiempo que a sus vehículos los calificaban como ‘tanques’. Estos movimientos están afectando negativamente a su imagen y reputación entre buena parte de la ciudadanía que se siente como un daño colateral de un conflicto que limita su opción de escoger libremente que servicio utilizar.
El bloqueo de calles en Madrid y Barcelona dio paso al corte incluso de carreteras en la capital, con el peligro que ello conlleva para los manifestantes sumado a las molestias ocasionadas a los ciudadanos. Y, el tono bélico y de desorden público, ha continuado en Fitur con bloqueo de otros transportes como el Metro e incluso la quema de contenedores. Sin duda, actitudes violentas y lejos de una postura dialogante que evitan el poder llevar a cabo una negociación.
Todavía no se sabe si el caos provocado llevará a lograr un acuerdo beneficioso para ellos en la lucha dentro del sector del transporte, lo que sí parece es que las molestias ocasionadas a los ciudadanos, su tono en la protesta y sus actos han hecho que multitud de usuarios se cuestionen primero si tienen razón o no y, después, si volverán a utilizar este servicio. Muchos usuarios ya han advertido en las redes sociales que estas acciones comienzan a tener consecuencias en la imagen del taxi:
Es muy difícil hacer las cosas tan mal como lo están haciendo los taxistas,enhorabuena a todos por perder cientos de clientes cada día! #HuelgaDeTaxis
— D (@DRPE_1) 23 de enero de 2019
No pienso coger un taxi en mi vida. No voy a participar en este monopolio de mafiosos que tenéis montado.#HuelgaDeTaxis
— Nia Cabanillas (@NiaCabani) 23 de enero de 2019
Me he hecho Twitter solo para poder deciros a los taxistas que habéis perdido un cliente. La huelga no significa violencia ni colapso #HuelgaDeTaxis
— Alnog (@Alnog3) 22 de enero de 2019
Construir una buena reputación entre la opinión pública se ha convertido en uno de los grandes retos para las empresas y/o sectores, que invierten ingentes esfuerzos en generar confianza. Si bien esta buena imagen es muy difícil construirla, por el contrario se destruye con una gran facilidad; así, el escrache montado al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, en Atocha destruyen las razones de los manifestantes ante una persona que intentaba dialogar:
He tratado de explicarles mi postura, pero entre amenazas e insultos es imposible tener un debate constructivo. Estas actitudes a los primeros que perjudican es a ellos. (2/3) pic.twitter.com/e7Jf6zzQtM
— Albert Rivera (@Albert_Rivera) 21 de enero de 2019
Por ello, mientras el conflicto continúe, el sector del taxi debe preparar la estrategia que llevará a cabo posteriormente para restablecer su imagen pública y recuperar la confianza de un consumidor que, en muchos casos, ve limitada su posibilidad de elección entre distintos servicios.
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