El 1 de febrero de 2001, Radio Marca inició sus emisiones con la intención de trasladar el éxito del periódico a las ondas. 18 años después de su nacimiento, la cadena está lejos de su mejor momento de forma debido a la notable pérdida de audiencia e influencia que ha sufrido desde hace un lustro. En medio de la ola de recortes que ha asolado en los últimos tiempos a Unidad Editorial, la emisora deportiva necesita nuevos alicientes que refuercen su posición y le conviertan en un activo vital para el grupo.
La tercera y última oleada del EGM de 2018 reportó un panorama bastante complicado para Radio Marca. La cadena cerró el año a la baja y solo fue capaz de sumar 353.000 oyentes, un registro bastante alejado del medio millón de personas que acostumbraba a anotar un par de años atrás y que la coloca como la decimoctava emisora más escuchada de España.
La debacle se hace más palpable si se comparan estos datos con los obtenidos en anteriores encuestas: Radio Marca se dejó un 15% de su audiencia en solo cinco meses, mientras que la caída se eleva hasta el 28% con respecto a diciembre de 2016. El ejemplo más claro de esta decadencia es la pérdida de la mitad de su público desde diciembre de 2012, cuando la emisora vivía su edad de oro.
Renovarse o morir, el dilema de Radio Marca
Más allá de los números en los que se mueve actualmente, lo verdaderamente preocupante es la tendencia a la baja que está siguiendo la emisora, que no es capaz de frenar la sangría de oyentes. De no cortar esta línea descendente, Radio Marca se enfrenta a la posibilidad de convertirse en una cadena residual sin ningún tipo de poder o influencia, lo que se traduciría como el golpe definitivo que podría desembocar en su desaparición.{wbamp-show start}
Una vez superada la mayoría de edad, Radio Marca debe afrontar la madurez con una serie de cambios que le haga reconectar con la audiencia. La emisora tiene que adaptarse a las nuevas realidades tecnológicas, desarrollando contenidos atractivos para el público joven. Además, la cadena necesita apostar por formatos y comunicadores que lleven riesgo y frescura a las ondas, algo que Radio Marca hizo muy bien en el pasado con espacios como No sabes cómo te quiero, de Andrés Montes.
En definitiva, la emisora requiere que se lleve a cabo una revolución que reposicione a Radio Marca como la referencia informativa que un día fue porque, de no ser así, su futuro podría complicarse a largo plazo. No es algo sencillo, ya que las diferentes reducciones de plantilla a las que se ha visto sometida la cadena han hecho mella pero, quizás, sea hora de apostar por el talento joven de la casa y dar luz verde a nuevas ideas que sorprendan y llamen la atención. Total, ¿qué mejor edad para hacer locuras que los 18 años?
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