Bajo el eslogan ‘Sueño saludable, envejecimiento saludable’, todos los años se celebra el Día Mundial del Sueño, específicamente el viernes anterior al equinoccio de marzo, donde profesionales del sector de la salud promueven múltiples programas para informar sobre los diversos problemas que están relacionados con el sueño en la actualidad.
Un grupo de representantes de la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM, por sus siglas en inglés), han informado que los problemas de sueño “constituyen una epidemia global que amenaza la salud y la calidad de vida de más del 45% de la población mundial”. Además sostienen que dormir bien es uno de los “tres pilares fundamentales para gozar de una buena salud”.
En España se estima que aproximadamente un 10% de la población padezca algún tipo de trastorno de sueño crónico o grave, esto se traduce a 4 millones de españoles afectados, según datos arrojados por la Sociedad Española de Neurología (SEN), quien también ha dado a conocer que el 20-25% de la población infantil presenta problemas de sueño, mientras que un 20-48% del segmento adulto se le complica conciliar el descanso en algún momento de su vida.
Por su parte, el Coordinador del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y Sueño de la SEN, el Dr. Carles Gaig Ventura, indica a la sociedad que “el sueño cumple un papel muy importante en nuestro metabolismo, en nuestro sistema inmunológico, en el estado de ánimo, en la memoria, en el aprendizaje, por lo que no dormir adecuadamente puede conllevar a que surjan complicaciones endocrinas, metabólicas, psicológicas, inmunológicas, psicomotoras, además que cada vez más se considera el mal sueño como un desencadenante o riesgo para determinados trastornos neurológicos, como ictus, Parkinson, Alzheimer o diversas enfermedades neuromusculares. En definitiva, no dormir adecuadamente es un problema de salud”.
El SEN ha advertido por medio de un informe que más de dos tercios de la población española sufren problemas relacionados con el sueño y no suelen buscar ayuda profesional, lo que significa que este grupo carece de un diagnóstico, y por ende, de un tratamiento o indicaciones determinadas para resolver dicha problemática. En el extremo de los casos, se conoce que al menos un 5% de los pacientes se automedica, en su mayoría, a diario, desconociendo que los fármacos hipnóticos pueden generar efectos secundarios en la salud.
Dormir bien = vida saludable
La Sociedad Española de Neurología ha manifestado que para lograr una buena higiene de sueño es requerido cumplir las siguientes recomendaciones:
– Respetar los horarios de sueño.
– Cumplir con los horarios de las comidas del día.
– Aprovechar los ciclos de luz para ajustar dichos horarios.
– Evitar todo tipo de agentes externos que puedan interrumpir el descanso (ruido externo como el móvil, televisión, radio, entre otros).
– Eliminar las comidas copiosas y las bebidas estimulantes antes de ir a la cama.
– Realizar ejercicios todos los días.
– Mantener un estilo de vida activo.
– Descansar en un colchón y almohadas cómodos.
Otros expertos e investigadores del sector de la salud a nivel mundial también recomiendan que las personas tengan en consideración estos tres factores a la hora de dormir:
– La duración del descanso debe ser lo suficiente como para que el individuo pueda reponer energía y estar en estado activo al día siguiente.
– La continuidad del sueño requiere ser lineal, es decir, sin interrupciones.
– La profundidad del sueño es un factor importante a la hora de recuperar el cuerpo del agotamiento, por lo que el descanso debe ser profundo para ser reparador.
Horas de sueño según la edad
Los profesionales de la salud han establecido una media de horas del proceso de descanso para lograr que el cuerpo se reponga y se prepare para el nuevo día que le espera. Cabe destacar que esto varía según la edad de la persona:
– 0 a 3 meses (recién nacidos): 14 – 17 horas al día.
– 4 a 11 meses (bebés):12 – 15 horas al día.
– 1 a 2 años (niños pequeños): 11 – 14 horas al día.
– 3 a 5 años (niños en edad preescolar): 10 – 13 horas al día.
– 6 a 13 años (niños en edad escolar): 9 – 11 horas al día.
– 14 a 17 años (adolescentes): 10,08 horas al día.
– 18 a 25 años (adultos jóvenes): 7 – 9 horas al día.
– 26 a 64 años (adultos): 7 – 9 horas al día.
– 65 años en adelante (adultos mayores): 7 – 8 horas al día.
Seguiremos Informando…
