Pablo Iglesias ha convertido a Amancio Ortega en protagonista inesperado después de criticar las donaciones del empresario gallego para mejorar los tratamientos de los enfermos de cáncer. El líder de Unidas Podemos aprovechó una de sus intervenciones para hacer un alegato e insistir en que “la sanidad no puede depender de un millonario”.
Numerosos rostros públicos y anónimos han salido en defensa del dueño de Zara, que ha donado más de 300 millones de euros a las comunidades autónomas para renovar los equipos tecnológicos con los que se trata a los pacientes que padecen cáncer. A cantantes como Miguel Bosé o políticos como Pablo Casado, Albert Rivera o Ángel Gabilondo se han unido numerosas diversas asociaciones y organizaciones médicas.
La Asociación Española Contra el Cáncer también ha emitido un comunicado en el que insisten en la importancia que tiene mejorar los medios con los que se combate esta enfermedad y que “cualquier ayuda procedente de la sociedad civil, bien sea a través de donaciones particulares, de empresas o fundaciones, es necesaria”. {wbamp-show start}
Esta asociación no es la única que ha defendido esta inyección económica a la sanidad pública. El Consejo General de Colegios Oficiales Médicos ha declarado que no es incompatible aceptar contribuciones de la sociedad civil siempre que sean para mejorar la asistencia sanitaria y la calidad de vida de los ciudadanos y si se realizan con la máxima transparencia y declaración de posibles conflictos de interés.
En este sentido aseguran que las donaciones, que alcanzarán los 310 millones de euros en el año 2021 han permitido adquirir equipos de última generación que permiten diagnósticos más precisos y proporcionan a los pacientes tratamientos menos invasivos y de menor duración. Aseguran también que las donaciones permiten contrarrestar los recortes que ha sufrido la sanidad pública en los últimos años, pasando de recibir una financiación el 6,5% del PIB en 2009 a la del 5,57% que está prevista para el 2020.
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