La prensa tradicional no ha conseguido salir a flote después de años en los que acumula pérdidas de lectores y de inversión publicitaria. Esta crisis se ha visto aumentada de manera alarmante en la prensa regional, donde la instauración de muros de pago no ha servido para frenar la sangría de despidos que hemos vivido en las últimas semanas.
En las primeras semanas del año el periodismo regional ha tenido que afrontar más de una treintena de bajas, la mayoría de ellas ejecutadas por los dos referentes de la prensa regional de nuestro país: Vocento y Prensa Ibérica, quienes acumulan 32 despidos en las siete semanas que han transcurrido desde que se estrenase el año 2020.
Vocento ha prescindido de 17 trabajadores que engrosaban las plantillas de sus medios locales. Además, de los despidos en el diario Las Provincias, donde ha cesado a siete trabajadores y en El Sur de Málaga, con tres despidos y el cierre de la delegación de Marbella, hay que sumar las cinco salidas del Taller de Editores (TESA) y dos en CM Vocento.{wbamp-show start}
Salidas que desde la editora de ABC justifican como una necesidad que se ajusta a las pérdidas que la compañía acumuló el pasado año que rondan el medio millón de euros. No obstante, la situación de crisis que vive Vocento no es mucho mejor que la que vive Prensa Ibérica.
El grupo que preside Javier Moll continúa con su plan de ajustes tras comprar el pasado mes de junio el Grupo Zeta. Desde la adquisición de la compañía, los despidos, las fusiones y el cierre de cabeceras se han convertido en la tónica general que ha desarrollado el grupo. El año 2019 acabó rozando el centenar de despidos en menos de seis meses y manteniendo la misma estrategia en el inicio de 2020.
En total, 15 trabajadores que se reparten entre las salidas en el diario Información y en el Diario de Mallorca –este último ya había sufrido más despidos en los últimos meses-han perdido su trabajo en las últimas semanas. Un nuevo varapalo para la prensa más cercana que ha provocado la reacción del resto de compañeros que, por el momento, mantienen sus puestos. En el caso del diario ‘Información’, la plantilla del diario se solidarizó con sus compañeros ejecutando una huelga de firmas.
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