La crisis sanitaria provocada por el coronavirus se ha trasladado a las empresas, que han tenido que activar una batería de medidas para intentar minimizar los daños ocasionados por la pandemia. Marcas de la talla de El Corte Inglés o Iberia han puesto en marcha una serie de iniciativas para reducir el impacto de sus respectivos expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).
En el caso de El Corte Inglés, la empresa ha presentado ante el Ministerio de Trabajo un ERTE con el objetivo de mantener el empleo a largo plazo. Se trata de una medida temporal que tendrá una duración de 14 días contados desde la fecha de publicación del Real Decreto y su ampliación vendrá determinada por el tiempo que dure el actual estado de alarma implantado en nuestro país. El expediente afectará a unas 22.000 personas y la compañía se ha comprometido a complementar las aportaciones que realice el Estado hasta cubrir la totalidad del salario de todos sus empleados, así como de los trabajadores de Sfera y Viajes El Corte Ingles.
Por su parte, Iberia ha optado por abonar un complemento a todos los empleados que puedan verse afectados por el ERTE que presentó la pasada semana. Este complemento será inversamente proporcional al salario que perciba el trabajador, de tal forma que quienes tienen los salarios más altos harán un sacrificio mayor, y viceversa. Con el objetivo de evitar cargar el peso de esta crisis en los trabajadores ‘rasos’, la aerolínea iniciará una reducción de salarios que llegará hasta el 50% en el caso de su presidente, mientras que los miembros del Comité de Dirección verán disminuido su sueldo en un 45%.{wbamp-show start}
Mapfre donará cinco millones de euros al CSIC
Pero no todo son recortes: Mapfre ha anunciado que donará cinco millones de euros al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para acelerar la investigación en España y, especialmente, aquella relacionada con el COVID-19. La aportación, permitirá realizar un estudio integral de esta pandemia, profundizar en el conocimiento del virus y sus mecanismos de transmisión, y propiciar no solo una vacuna frente al mismo, sino también base científica para proteger mejor a la población frente a futuras pandemias.
Dicha acción se produce en el marco de una estrategia de la compañía frente al COVID-19 basada en tres líneas de actuación: proteger a las personas, salvaguardar la actividad económica, especialmente el empleo, y ayudar a la sociedad a superar el impacto a medio y largo plazo que esta crisis mundial, desafortunadamente, va a producir.
“Las empresas, como ciudadanos corporativos, también debemos tener un papel relevante participando en alianzas público – privada como esta que permitan acelerar la lucha contra la pandemia. Es en estos momentos cuando tenemos que dar pasos firmes que ayuden a la sociedad a superar esta situación tan extraordinaria, y contribuir a la salida de esta crisis con el menor impacto posible. Todos estamos llamados a la acción coordinada y solidaria, nos sentimos muy orgullosos de contribuir a la investigación que está liderando el CSIC, y esperamos que sean más las entidades que se sumen a este esfuerzo para la consecución de la vacuna que necesita la población mundial”, remarca Antonio Huertas, presidente de Mapfre.
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