Si el viernes pasado Ramón Pérez-Maura se despedía con un pintoresco comunicado en castellano e inglés (lo del “farewell” fue la anécdota con rechifla del sector) acusando al consejero delegado de Vocento, Luis Enríquez, de haber desvirtuado el periódico fundado por Torcuato Luca de Tena, este domingo llegaba la réplica en forma de ‘Tercera’ del nuevo director, Julián Quirós.
La respuesta al “marqués”, como era conocido por cierto sector de la redacción de ‘ABC’ por su rancio abolengo y sus maneras decimonónicas, había que interpretarla dentro del alegato de Quirós sobre la historia de ‘ABC’, empleando mensajes encriptados para conocedores. Por ejemplo, despreciando a “elegidos o autoproclamados guardianes de las esencias” del diario y a los “signatarios de la limpieza de sangre” sobre quiénes podían firmar en ‘ABC’.
No había que ser un hacha para darse cuenta de quién era el destinatario del mensaje, y más cuando Quirós recordaba que el propio fundador instauró los premios Mariano de Cavia rindiendo homenaje a un periodista “manifiestamente alejado de los postulados de Don Torcuato”.
La salida de Pérez-Maura fue la comidilla del pasado viernes, el cotilleo de las redacciones de la jornada en unas redacciones que, en estos momentos, están más preocupadas por otras cuestiones cercanas a la supervivencia. Al fin y al cabo, no deja de ser llamativa una salida de ‘tierra quemada’ contra Enríquez cuando éste lleva años en el puesto.
Como señalan fuentes de la redacción, “de repente se ha iluminado”. Otros, con más sorna, hacen predicciones: “Veremos lo que tarda en ser el ídolo de los que hace algún tiempo se ‘descojonaban’ de él tildándole de personaje de ‘La Escopeta Nacional’, por aquel famoso artículo de la partida de caza y su cabreo con los agentes del Seprona que no se descubrieron ante una oración”.
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