El anuncio en exclusiva de la salida de Pablo Iglesias como vicepresidente del Gobierno y su paso a candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, fue la confirmación definitiva a la pintoresca relación que llevaba tiempo observándose en la capital: la que une a Unidas Podemos, en concreto a su líder, con la delegación madrileña de ‘La Vanguardia’, con Enric Juliana al frente. Recordarle en su época de colaborador con Del Olmo en el que negaba la persecución del español, entre otras, turbio…
El exdirigente del PSUC, responsable de la antena en la capital del diario del conde de Godó, ha mostrado en ocasiones su “conexión” con el partido morado, participando en actividades de la formación (como su universidad de verano) o en las actividades televisivas de Iglesias en el ‘Fort Apache’ de Hispán TV.
Pero, sin duda, quien se lleva la palma en activismo periodístico es su protegido, Pedro Vallín, otro habitual del ‘entertainment’ televisivo de Iglesias y Juan Carlos Monedero y “conseguidor” de la exclusiva de su dimisión y candidatura madrileña. Una exclusiva, por cierto, que cayó como un tiro entre algunos amigos mediáticos de Podemos, al ver que el líder elegía a un medio “burgués”, de amplia proyección, en lugar de uno militante, y oprimido por el capitalismo imperante… ¡menudo vacilón! Se traen los colegas.
En los últimos tiempos Vallín viene agitando desde las páginas de ‘La Vanguardia’ en favor de Unidas Podemos, trasladando su agenda al diario del aristócrata catalán y grande de España, el Conde de Godó. También obtuvo la primera entrevista en prensa de Ione Belarra, como ministra de Derechos Sociales, mientras que la exclusiva televisiva fue para Jesús Cintora, en su programa de La 1 de TVE, ‘Las Cosas Claras’.
A esto hay que sumar que Vallín y el entorno dirigente de Unidas Podemos se retroalimentan. Los artículos y tuits del periodista de ‘La Vanguardia’, son difundidos por las cuentas de los mandatarios morados de forma habitual y viceversa, ya que Vallín, sin despeinarse, coloca el argumentario de Podemos de forma habitual.
No deja de ser curioso, por otra parte, que el discurso de Unidas Podemos sobre la nueva lucha contra el “fascismo”, personificado en Vox, encuentre acomodo en el entorno de ‘La Vanguardia’, que tan bien sirvió durante años al franquismo. Pero si algunos dirigentes de Podemos suelen rescatar portadas de hace casi un siglo para insultar a los medios, las de ‘La Vanguardia’ ensalzando al Caudillo nunca están presentes. Ya saben el por qué. Y, la pregunta queda en el aire… ¿qué hacen Angelito y su novia que no actúan?
Por cierto, algunos que ya han leído estas líneas, nos apuntan la posibilidad de haber titulado: ‘Juliana, el revolucionario a sueldo de un Condemor’.
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