NUEVO ESTUDIOS RELACIONADOS CON EL COVID-19

Hasta el 80% de los pacientes críticos por COVID-19 presentaron delirium

LA REVISTA MEDICINA INTENSIVA PONE LAS CLAVES PARA PREVENIR Y TRATAR EL DELIRIUM EN PACIENTES COVID-19

La pandemia, de la que es causante el SARS-CoV-2, se ha asociado con una prevalencia de delirium extremadamente alta, sobre todo en pacientes con ventilación mecánica, a los que ha llegado a afectar hasta en un 80% de los casos

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El delirium es un cuadro clínico agudo cuya característica principal es la falta de atención, acompañada de pensamientos desorganizados y de una alteración del nivel de consciencia. Su prevalencia en los pacientes que ingresan en la UCI se ha incrementado desde que comenzó la pandemia.

El tipo de delirium más predominante es el hiperactivo, caracterizado por un estado de agitación inusual al retirar fármacos sedantes, difícil de controlar. En ocasiones, presenta graves repercusiones tales como las autoextubaciones.

Por esta razón, se ha vuelto fundamental trazar protocolos para el tratamiento y prevención del delirium como los que han recogido el Grupo de Trabajo de Sedación, Analgesia y Delirium de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) en el artículo Delirium y COVID-19. Aspectos prácticos que han sido recogidos por la revista Medicina Intensiva.

Posibles causas de delirium en pacientes Covid

La causa de delirium que más se repite en pacientes afectados por el Covid-19 es la que deriva de la confluencia de factores clásicamente asociados al desarrollo de este como son el dolor, el miedo, la ansiedad, el aislamiento familiar, la privación de sueño y la inmovilización prolongada. A todo ello se suma, además, la afectación del sistema nervioso central que provoca el SARS-CoV-2, bien por daño neuronal directo o bien por mecanismos inmunológicos.

“Estos pacientes deben ser considerados como población
de alto riesgo de delirium, lo que obliga a la implementación, desde fases tempranas, de medidas destinadas a su identificación, prevención y tratamiento”, explican algunos de los participantes en este artículo.

El estudio elaborado por las doctoras Carola Giménez-Esparza (Hosp. de la Vega Baja – Orihuela), Sara Alcántara (Hosp. Univ. Puerta de Hierro – Majadahonda) y Manuela García (Hosp. Univ. Virgen de la Macarena – Sevilla), expone un paquete de medidas no farmacológicas para la prevención de este problema y su posible tratamiento.

Medidas para evitar el delirium

Entre las medidas que recoge el informe se encuentra priorizar la analgesia sobre la sedación, la movilización y rehabilitación precoz, el ajuste de los parámetros de ventilación mecánica o el apoyo psicológico.

Aunque como recogen los datos obtenidos “no existe ningún tratamiento farmacológico que haya demostrado su utilidad en la prevención del delirium en pacientes afectados por el SARS-COV-2. La implementación de este tipo de medidas no farmacológicas generales, recomendadas tanto para la prevención, como para el tratamiento, puede resultar eficaz, con especial atención a algunos aspectos diferenciales de esta pandemia”.

Las doctoras destacan, que lo más importante es evitar el aislamiento, facilitar la comunicación de los pacientes y el acompañamiento familiar como unas de las medidas más importantes para prevenir el delirium y favorecer la recuperación de los pacientes. Y respecto a las medidas farmacológicas, recomiendan una estrategia diferente según el tipo de delirium que presente el paciente, siempre intentando que favorezca y no empeore el descanso nocturno de las personas afectadas.

Aplicar medidas clásicas para disminuir el delirium en pacientes COVID-19 con ventilación mecánica es dificultoso, debido a la existencia de barreras como la sedación profunda, la dispersión de pacientes y las limitaciones de visitas familiares, entre otros. Por ello, es necesario realizar ciertos cambios en las medidas existentes e incorporar otras nuevas como ajustar el respirador al paciente y no el paciente al respirador, o no presuponer que todos los pacientes con ventilación mecánica necesitan sedación profunda y bloqueo neuromuscular continuado. “Hay que evitar ambas, en la medida de lo posible”, concluyen las doctoras.

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