PFIZER: EL LABORATORIO MÁS OPACO DE LOS QUE OPERAN EN ESPAÑA

Sergio Rodríguez, director general de Pfizer España, nombrado especialista en COVID

GRACIAS A SU EXCELENTE TRABAJO 

A unos 26 meses de la declaratoria de pandemia, la vacuna anti-COVID de Pfizer es motivo de análisis por diversas denuncias sobre las alteraciones en sus protocolos y sus posibles consecuencias

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Sergio Rodriguez, actual Presidente & Director General de Pfizer España, ha pasado a ser considerado el máximo responsable en COVID de esta gran compañía farmacéutica gracias a su excelente gestión desde que comenzó la crisis sanitaria provocada por la Covid-19 en España. Tal es así, que actualmente Pfizer se encuentra en el punto de mira siendo motivo de análisis por denuncias sobre alteraciones en los protocolos de su vacuna anti-covid.

Desde el inicio de la pandemia, el responsable de la farmacéutica en España ha defendido a capa y espada la importancia de la transparencia y de la información veraz sobre los beneficios y riesgos que conlleva la vacuna, a cual considera, “la única lectura positiva de esta pandemia”. Unas palabras que contrastan con la realidad que se vive actualmente donde Pfizer está siendo investigada por los secretos que sus fabricantes prometieron guardar.

En concreto, según el médico Joseph Mercola quien publicó un extenso trabajo titulado “Documentos de Pfizer revelan los peligros de su vacuna anti-COVID”. “A mediados de noviembre de 2021”: “la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) publicó una serie de documentos. Revelan que durante los primeros tres meses del lanzamiento de la vacuna antiCOVID de Pfizer recibió 42.086 reportes de eventos adversos que incluyeron 1.223 muertes”.Documentos ampliados por la FDA con unas 10.000 páginas en total, que incluían 9 páginas completas de registros de efectos secundarios. Unos 158.000 problemas de salud diferentes. 

Además, al parecer, los problemas de la vacuna antiCOVID de Pfizer incluían pacientes que se clasificaron de manera errónea en el grupo de “población sana”. Y números de eventos adversos graves (SAE) que se dejaron en blanco. Además, faltaron códigos de barras de las muestras. Y se aplicaron segundas dosis a destiempo.

También hay dudas sobre si los participantes recibieron un seguimiento correcto durante un tiempo adecuado. Y los eventos adversos se enumeraron como «no graves» sin importar que incluían hospitalización prolongada y mucho más. Al margen de la parte médicaPfizer en su fase de comercialización de la vacuna fijó un precio muy alto que debió bajar.

Unos hechos, de los que Sergio Rodríguez, como actual director general de Pfizer España no es total responsable debido a los cargos superiores que a día de hoy hay por encima de él, pero de los que si es cómplice. Y es que, él mismo ha defendido y tapado para mantener el nombre y el valor de su compañía a pesar del peligro que todo lo anteriormente mencionado puede suponer para la salud de las personas.

Sin embargo, las reglas del juego no han cambiado y la ineficiencia sigue siendo premiada una vez más, a pesar de que cada día que pasa, la narrativa oficial sobre la COVID se vuelve menos creíble al igual que quienes la llevan a cabo, Por tanto, será interesante ver si llegará a existir una gota capaz de derramar este vaso de egos.

Seguiremos informando…

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