Radio Nacional de España (RNE) quiere a Carlos Herrera en sus mañanas. La directiva de la emisora pública ha valorado de una forma positiva el hecho de que el locutor levantase la audiencia de COPE en la franja matinal y quiere repetir la operación en su ámbito para devolver a la cadena el prestigio y la audiencia con que contó en otros momentos.
La operación, además, estaría bendecida por sectores cercanos al Gobierno y al PSOE con los que Herrera mantiene excelentes relaciones, fraguadas en décadas de presentación en Canal Sur bajo la Junta de Andalucía socialista, que habrían trasladado la excelente imagen que daría su fichaje por parte de RNE de cara al público conservador.
El problema de la operación no reside solamente en el fichaje de Herrera, sino en que obligaría al comunicador a dar marcha atrás en otra maniobra destinada a aupar a su vástago, Alberto -conocido en la COPE como ‘El Principito’-, como líder de las mañanas radiofónicas y supremo heredero de su legado, para disgusto de algún ubicuo, polivalente y anaranjado pretendiente a querer ser califa en lugar del califa.
Ante esta posibilidad, en Ábside Media ya buscan una solución de recambio ya que consideran que la operación está prácticamente cerrada. El hombre de Fernando Giménez Barriocanal, Javier Visiers, carbura una solución salomónica bendecida por José Luis Restán en calidad de presidente no ejecutivo y fray inquisidor del grupo episcopal: otorgar el tramo serio de la mañana de COPE a Ángel Expósito, ‘El Tron’, y la parte magacín a Alberto I de Herrera.
Ambos candidatos son del agrado de la directiva de la emisora y contarían con el plácet de buena parte de los miembros de la Conferencia Episcopal. Expósito, hombre llano en todos los sentidos, conocido por su lenguaje coloquial a la par que florido, especialista en militares y santos, intrépido reportero allá donde esté la noticia (de las Chimbanbas a la calle Génova de Madrid) y, por último pero no menos importante, con un importante tirón por su parentesco desaprovechado con la actriz Esther Expósito, sería la voz ideal para el primer tramo.
En cuanto a Alberto I de Herrera, de casta le viene al galgo, señalan en la emisora. Y punto. Pero esta no es la única noticia reseñable en el Día de los Inocentes. Fuentes de La Moncloa transmiten estos días que se viene crisis en la fontanería del Ejecutivo después de que Miguel Barroso haya perdido pie en los asesoramientos a Pedro Sánchez.
Al parecer, el presidente no estaría nada contento con Barroso y ya llevaría tiempo recurriendo a los servicios de asesoramiento de un veterano lince de la comunicación, Benito Berceruelo, de Estudio de Comunicación, experto en gestión de crisis y en fabada asturiana.
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