Las cifras de envejecimiento en nuestro país van en aumento, habiéndose producido el mayor incremento en los últimos años. De hecho, el Instituto Nacional de Estadística (INE) destaca que en 2022 en España ya se contabilizaban 133 personas mayores de 64 años por cada 100 menores de 16. El envejecimiento provoca un deterioro progresivo del sistema inmune y un incremento de las enfermedades que, a la larga, supone una sobrecarga para el Sistema Nacional de Salud. Además, hay que tener en cuenta que las enfermedades prevenibles por vacunación en adultos siguen siendo causa importante de morbilidad, mortalidad, discapacidad y gasto sociosanitario.
Estos datos se pusieron sobre la mesa durante la reunión del comité de Innovación del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS), en la que se exploró el presente y el futuro de la vacunación en adultos y en la que participaron profesionales de GSK, en concreto, Sergio Ostalé, director de Market Access de GSK, Ana Hernando, directora de Government Affairs de Vacunas, y la doctora Isabel Abad, adjunta a la Dirección General Médica de ASISA.
Durante la sesión se mostró que los beneficios de la vacunación van más allá de la prevención de enfermedades agudas, ya que también hay hoy en día investigaciones con un enfoque de tratamiento en el campo de la medicina, las vacunas terapéuticas, que utilizan la estimulación del sistema inmunológico del propio cuerpo para combatir enfermedades, en lugar de simplemente prevenirlas.
Se estima que la inversión en inmunización de adultos puede generar un retorno de la inversión (ROI) de entre el 40% y el 300% en costes sociales y de atención sanitaria. A modo de ejemplo, los expertos congregados en esta reunión hablaron de la repercusión del herpes zóster (HZ), una enfermedad vírica causada por la reactivación del virus varicela-zóster, también conocido como culebrilla – y de la neuralgia postherpética (NPH) en los adultos y de sus consecuencias como una de las enfermedades más dolorosas e incapacitantes
Ahora bien, después de que las erupciones cutáneas del herpes zóster se han curado, algunas personas pueden experimentar dolor persistente en el área afectada. Esto se conoce como neuralgia postherpética y puede durar meses o incluso años. En este sentido, GSK ha puesto a disposición una vacuna para prevenir el herpes zóster recomendada para la prevención del herpes zóster y, por lo tanto, de sus efectos y consecuencias, entre ellas la neuralgia postherpética.
A lo largo de la reunión se puso de manifiesto la necesidad de que exista un calendario único en el que se contemple la vacunación a lo largo de la vida de las personas para prevenir virus y reducir su incidencia. Además, hicieron hincapié en la necesidad de impulsar el liderazgo profesional a la hora de recomendar la vacunación en adultos, y la colaboración privada-pública en campañas de vacunación, así como un acceso igualitario a nivel territorial a las vacunas financiadas en centros privados.
El secretario general de la Fundación IDIS, Ángel de Benito además, aseguró que, “la integración de la sanidad privada en el sistema de vacunación puede ser beneficiosa para proporcionar una imagen más completa de la cobertura de vacunación en el país, así como para realizar una coordinación y seguimiento más eficientes evitando duplicaciones o lagunas en la administración de vacunas, entre otros aspectos”.
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