El deporte femenino se abre hueco a pasos agigantados. Así lo demuestran los datos de audiencia del Mundial de fútbol celebrado en Australia, donde España se ha proclamado campeona del mundo tras vencer a Inglaterra por un gol a cero, obra de Olga Carmona.
El combinado nacional ha encandilado a miles de españoles que han seguido con mucho interés la evolución de las futbolistas dirigidas por Jorge Vilda. Una victoria que sabe a gloria y que han celebrado con especial efusividad en Televisión Española, hogar de la selección española en este Mundial.
La 1 ha emitido todos y cada uno de los partidos que España ha disputado en Australia, demostrando así una vez más su firme compromiso por la visibilización del deporte femenino. Una apuesta que ha redondeado este domingo con la consecución del título tras una final que ha disparado los índices de audiencia.
El encuentro entre España e Inglaterra fue visto este domingo por 5.599.000 espectadores, cosechando un espectacular 65,7% de cuota de pantalla en La 1. Un gran dato que, sumado al de la semifinal (45% de cuota y 1.921.000 espectadores) que la selección disputó contra Suecia ha llevado a la cadena pública a registrar datos que no hace tanto tiempo se antojaban utópicos tratándose de partidos de fútbol femenino.
De menos a más
No obstante, y como suele ocurrir en este tipo de torneos, la audiencia ha ido in crescendo según España iba acercándose a la final. El primer partido del combinado nacional, frente a Costa Rica, fue visto por 322.000 espectadores, con un 13,2% de cuota de pantalla.
Cinco días más tarde, frente a Zambia, la selección femenina sedujo a 511.000 espectadores, aumentando asimismo la cuota hasta el 20,6%. Contra Japón (18,6% y 449.000 espectadores) los datos fueron muy similares, pero los octavos de final, contra Suiza, la audiencia cayó ligeramente (37,7% y 398.000 espectadores).
Contra todo pronóstico, el partido de cuartos de final empeoró al de octavos. El España – Países Bajos tan solo pudo reunir a 314.000 espectadores pese al buen dato share (27,4%). Estas oscilaciones, más allá de una explicación lógica, responden a la caída del consumo televisivo propia del verano.
Pese a ello, la audiencia de los dos últimos partidos demuestra la notable atracción que genera la selección femenina de fútbol y la acertada estrategia de TVE a la hora de apostar de lleno por la emisión del torneo internacional.
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