La tragedia causada por la DANA en la Comunidad Valenciana y parte de Castilla La-Mancha sensibilizó a América, incluso antes que a los políticos españoles. Por distintos canales, gobiernos y representaciones diplomáticas lanzaron mensajes de condolencia por las víctimas mortales, de solidaridad a los afectados, de colaboración a las autoridades en las labores de rescate y de apoyo a sus nacionales en la zona, pocas horas después de que las primeras imágenes de coches apilados y garajes anegados comenzaran a circular.
Uno de los primeros en pronunciarse fue el Gobierno de Perú. El mismo 30 de octubre, envió sus condolencias por la pérdida de vidas humanas, y su solidaridad por las graves afectaciones y daños materiales. En Comunicado Oficial N° 045 – 24, reveló estar en estrecha coordinación con las autoridades locales, y puso a disposición los siguientes medios de contacto para su nacionales en la zona: teléfono: 636 177 719 y correo electrónico: info@consuladoperuvalencia.org.
También el 30 de octubre, el Gobierno de Chile se pronunció, a través de su Cancillería. En un comunicado, expresó su solidaridad con el Gobierno y el pueblo de España, por las devastadoras inundaciones, y envió sus condolencias a los familiares de las víctimas y a las comunidades afectadas.
Estados Unidos se pronunció el 31 de octubre. “Nuestras más sinceras condolencias a todos los afectados por las devastadoras inundaciones en Valencia. Lamentamos la pérdida de vidas causada por este fenómeno”, declaró a la agencia Efe Sean Savett, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. “Estados Unidos ha estado en contacto con las autoridades españolas y estamos listos para ayudar si se solicita”, agregó. Ese mismo día, Rian Harris, encargada de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en España, también se pronunció: “Estamos conmocionados por la tragedia que afecta a las comunidades de Valencia, Castilla-La Mancha y Andalucía. Nuestros pensamientos están con las víctimas, sus familias y con todos los afectados. Nuestra bandera ondea a media asta en señal de duelo y solidaridad con el pueblo español”. La bandera de Estados Unidos en su sede diplomática en España ondea a media asta.
También el 31 de octubre, el Gobierno de Colombia, envió un mensaje de solidaridad a los afectados. “La unión y el apoyo brillan en los momentos más difíciles. Ante la reciente catástrofe climática en Valencia, España, Colombia reafirma su compromiso con nuestros connacionales afectados, garantizándoles refugio y asistencia. Sin importar la distancia, seguimos unidos en solidaridad”, dijo a través de sus redes sociales. Al día siguiente, el Ministerio de Relaciones Exteriores colombiano y su Consulado en Valencia, informó de su labor de asistir y proteger a sus nacionales damnificados. Luis Gilberto Murillo, ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, anunció: “He dado la instrucción de poder asignar los recursos del Fondo de Migraciones para que se pueda responder a las personas que quieran retornar o las personas que han sido impactadas en sus viviendas para que puedan tener un proceso de recuperación de sus viviendas. Además, la Cancillería, a través de nuestro Grupo Especial de Reacción Inmediata, está trabajando con la Cónsul para que se pueda asistir a muchas de las familias facilitándoles elementos básicos”.
Argentina se pronunció el 31 de octubre igualmente. Manuel Adorni, Vocero Presidencial, responsable de la comunicación del gobierno argentino, dijo que “el presidente Javier Milei ha dado instrucciones al embajador argentino en España, Roberto Bosch, para ofrecer al Gobierno español y al titular de la Comunidad Valenciana asistencia humanitaria argentina”. Así, el Gobierno argentino puso a disposición el envío de ayuda y asistencia técnica a través de la Comisión de Cascos Blancos. “Argentina manifiesta su solidaridad con el pueblo español y con todos los damnificados por este trágico temporal, uno de los más letales y dañinos en la historia de España”, publicó en su cuenta de X.
El Gobierno de Brasil mostró su consternación el 31 de octubre. “Al expresar sus condolencias a las familias de las víctimas, Brasil expresa su solidaridad con el pueblo y el gobierno de España”, dijo el Gobierno de Lula da Silva, que hizo un llamado “a los países socios a redoblar esfuerzos para adaptarse a los impactos del cambio climático, como reacción a la multiplicación de eventos naturales extremos”. También dijo estar “monitoreando la situación a través de los Consulados Generales de Brasil en España, con el fin de brindar asistencia consular adecuada a los brasileños que hayan resultado afectados por los impactos de las repentinas inundaciones”.
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