Juan Abarca, presidente de HM Hospitales, ha publicado una nueva entrada en su perfil de LinkedIn. En esta ocasión, hace una reflexión sobre la prevención del suicidio en España con motivo del día internacional.
El suicidio en nuestro país es un grave problema de salud pública que afecta a miles de personas cada año. Es la primera causa de muerte no natural y, en la mayoría de los casos, supera a las muertes por accidentes de tráfico. Las estadísticas oficiales muestran una tendencia preocupante, con un aumento en el número de suicidios, especialmente entre los jóvenes y las personas mayores.
A continuación reproducimos las palabras de Juan Abarca:
“Cada vida importa. Y no se me podía pasar comentarlo, aunque lo tengo muy presente siempre porque el suicidio es, quizá, la señal más dolorosa del fracaso de una sociedad como colectividad”, señala.
Significa que no hemos sido capaces de cuidarnos unos a otros como deberíamos y causas como ésta nos comprometen, por cuestiones éticas y morales, a todos y cada uno de nosotros.
En España, cada año casi 4.000 personas pierden la vida por esta causa. Es la primera causa de muerte no natural en nuestro país. Y detrás de cada número hay un nombre, una familia rota, un proyecto de vida que se apaga.
Afortunadamente, en los últimos años la tendencia ha comenzado a descender. Pero queda muchísimo camino por recorrer.
Además tal y como defiende con toda la razón la psicóloga Claudia Tecglen, tenemos la obligación moral de mirar de frente a las personas más vulnerables: aquellas que conviven con la discapacidad y para quienes el riesgo de suicidio es mucho más elevado que en la población general, según muestran los estudios.
Nosotros desde HM Hospitales hemos empezado a trabajar con la asociación que preside, la asociación convives con la espasticidad y la fundacion Claudia Tecglen, en la formación para la detección del personal sanitario y las familias del suicidio en personas con discapacidad en un proyecto pionero que presentaremos en breve y que esperamos que se extienda por otros centros para seguir construyendo redes de apoyo que nos ayuden a entender que nadie esta solo
Y no es casualidad: el aislamiento, la discriminación, las barreras para acceder a la salud mental y la falta de apoyos adecuados multiplican el sufrimiento y la desesperanza.
Por eso la prevención del suicidio no es solo cuestión de protocolos.
Es cuestión de humanidad.
De escuchar más
De estar atentos
De estar presentes
De tender la mano para llegar a tiempo
De crear entornos donde la dignidad, la inclusión y la esperanza no sean palabras, sino realidades.
Hoy quiero lanzar un mensaje sencillo pero firme: cada vida que salvemos importa. No podemos permitirnos normalizar el silencio, ni resignarnos a las estadísticas.
Porque prevenir el suicidio es, al final, defender la vida en su forma más plena y valiosa.
La de la vida que se va a perder pudiéndo evitarlo
Seguiremos Informando…
