Antonio Jiménez no acaba de encontrarse después de su forzada ‘jubilación’ como presentador de El cascabel en 13TV, la cadena de televisión episcopal de Ábside Media. Aunque mantiene un breve espacio en el programa, Jiménez se ha lanzado a explorar terrenos, después de años viviendo bajo el palio mediático de los obispos. Y parece estar descubriendo que ahí afuera hace frío.
Ayer, por ejemplo, sirvió como coartada de pluralismo a la TVE de José Pablo López (o sea, a la de Pedro Sánchez) en el programa del dúo Flich-Miró, Directo al grano, donde tuvo que defender la postura crítica con el aborto con menos soltura que cuando estaba cobijado en el manto episcopal y bajo la sombra de Carlos Herrera. Y todo para ser arrasado por la versión oficial, defendida por colaboradores y presentadores de parte.
A pesar de todo, y de que Jiménez haya descubierto lo que cuesta ganarse el sueldo en terrenos enemigos -quién le iba a decir que acabaría convirtiéndose en el ‘tonto útil’ de servicio del programa de turno, como les sucedía, por ejemplos, a ciertos contertulios de izquierda en El gato al agua de Intereconomía que presentaba y, sobre el papel, dirigía-, todavía le queda el cobijo, para lamerse las heridas, de Telemadrid. Dios aprieta y sus representantes en la Tierra a veces te arramblan al desván, pero no ahoga, depende de la calidad del vino.
Y es que, por otra parte, todo queda entre los servidores de los obispos. Porque hay que recordar que cuando Jiménez no cobraba en la Intereconomía de Ariza, la entonces 13TV del oscuro y turbio Fernando Giménez Barriocanal y un ignoto José Pablo López acudió al rescate ‘opando’ a tertulianos y al propio presentador y director (nominal, que al fin y al cabo aquel cotarro lo muñía el capo Ariza).
Una maniobra, por otra parte, que recuerda bastante al rescate que le realizó el propio Ariza cuando el Gobierno Zapatero le puso de patitas en la calle de RNE y el navarro -ahora gurú/dueño de VOX y entonces turiferario del PP- le proporcionó cobertura, sueldo y despacho como director (qué gracia) de Radio Intereconomía, encumbrándole después al frente de El gato al agua en su televisión.
Los que aún tengan memoria recordarán, además de su natural propensión a no sacarse la mano del bolsillo, porque el hombre es más bien agarrado, como algunos llamaban “el zoco” a su despacho por la cantidad de bienes y presentes que se acumulaban en él, desde las pastillas aquellas de uva a las camisas con el torito y la bandera nacional. ¡Gratis total, oiga!
Pero, sin duda, lo más curioso es ver cómo, de nuevo, Jiménez -tan ‘pepero’ él, alfombrilla de Carmen Martínez Castro en su momento- ha terminado acogido al sagrario de José Pablo. Otra vez.
Este martes el jurado de la Federación de Asociaciones de Radio y Televisión de España ha fallado los ganadores de la 52ª Edición de los Premios Antena de Oro. Uno de los premiados será, precisamente, Antonio Jiménez, reconocido por sus “12 años al frente de ‘El Cascabel’ en TRECE”, espacio que ha consolidado como un “referente del análisis y la actualidad nocturna en televisión”.
Seguiremos Informando…