La inteligencia artificial (IA) ha entrado en las redacciones españolas, pero no para tomar el control. Un nuevo barómetro, “Informar en tiempos de inteligencia artificial”, revela que los periodistas están adoptando las herramientas de la IA generativa con un criterio de hierro, reafirmándose como los guardianes de la ética y la responsabilidad editorial.
El estudio, basado en una encuesta a 120 profesionales del sector, desvela una realidad clara: el 74% de los periodistas ya usa la IA en su día a día. Sin embargo, este uso es quirúrgico y funcional, no sustitutivo.
Los profesionales han delegado las tareas más mecánicas a sus nuevos “asistentes virtuales”, pero han marcado una línea roja infranqueable en las funciones críticas:
- Asistente funcional: La IA ayuda con la sugerencia de titulares (56,3%), la transcripción de entrevistas (46,5%) y el apoyo creativo (49,3%).
- Decisión humana: El uso de la IA para la generación automática de noticias es marginal (solo un 4,2%), y para el fact-checking apenas alcanza el 11,3%.
Esta cautela no es casualidad: más de la mitad de los encuestados (53,5%) cree que la redacción autónoma de noticias debería estar prohibida o limitada. El consenso es que la IA debe aportar agilidad, pero la responsabilidad editorial no se delega.
“La IA puede sugerir un titular, pero no sustituir la voz del periodista. Puede documentar, pero no decidir qué es noticia. El periodismo no renuncia a su función, sino que la redefine desde la responsabilidad”, señala Mónica González Ortín, Country Manager de Axicom.
Pese a la rápida adopción, la transformación tecnológica llega con un déficit ético y formativo. El barómetro subraya que la mayoría utiliza herramientas generalistas como ChatGPT (82,3%) sin contar con protocolos definidos en sus medios (solo el 31% tiene políticas sobre IA).
Este vacío genera preocupaciones fundadas en el gremio:
- Pérdida de calidad: La mayor preocupación es la pérdida de calidad informativa (55,7%).
- Riesgo de sesgos: Casi la mitad teme la difusión de errores o sesgos (48,2%).
- Transparencia urgente: El 60% de los periodistas considera que el lector debe ser informado si una máquina ha participado en el proceso informativo.
La conclusión del estudio es clara: el futuro del oficio es híbrido, pero solo prosperará si se dota de más transparencia, más formación y, sobre todo, si el criterio humano sigue siendo el único punto de anclaje para la credibilidad. Los periodistas están aprendiendo a usar la IA, pero tienen muy clara su responsabilidad: la supervisión humana sigue siendo innegociable.
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