El Consell ha ejecutado ya el 60% de las ayudas directas solicitadas por familias y empresas valencianas afectadas por la riada del pasado 29 de octubre, con 894 millones de euros abonados. En total, la Generalitat ha movilizado, comprometido o gestionado 2.500 millones de euros entre contratos de emergencia, dotaciones presupuestarias y otras actuaciones destinadas a la reconstrucción de las poblaciones dañadas.
Del importe total, 1.500 millones se destinan a ayudas directas, que el Ejecutivo autonómico está tramitando con lo que califica como “una gestión ágil, rápida y sin burocracia”. Las principales partidas —ayudas de primera necesidad, pérdida de vehículos, apoyo a autónomos y trabajadores en ERTE— están prácticamente abonadas al 100%, incluidas las líneas ampliadas que se concedieron sin trámite adicional y se ingresaron directamente en las cuentas de los afectados en apenas tres semanas.
En concreto, las ayudas de primera necesidad han supuesto 240,6 millones de euros para cerca de 27.000 hogares, mientras que 85.500 afectados han cobrado la ayuda por pérdida de vehículo, con un importe global de 331,8 millones. A través de Labora, más de 18.300 autónomos sin empleados han percibido 110 millones, y 12.000 trabajadores afectados por ERTE han recibido 8,6 millones en ayudas. A estas cifras se suman los 76,2 millones ya abonados a empresas y autónomos con trabajadores y los 83 millones comprometidos del Plan Ara Empresas.
Desde la Generalitat destacan que este paquete de medidas constituye un “esfuerzo económico sin precedentes” para hacer frente a las consecuencias materiales de la riada, mientras la administración autonómica denuncia la falta de apoyo del Gobierno central.
El Ejecutivo valenciano critica que el Gobierno central siga excluyendo a 28 municipios —con una población conjunta de 80.000 personas— del plan estatal de ayudas para la reconstrucción de infraestructuras municipales, lo que obliga a la Generalitat a afrontar buena parte de la recuperación por la vía del endeudamiento.