La concesión de los derechos de la Liga, la Copa del Rey de fútbol y la Champions League a Vodafone ha pillado a los directivos de comunicación con un pie cambiado. El mismo equipo admite inexperiencia en la gestión de contenidos audiovisuales, un mercado que Vodafone no había explotado de manera tan masiva como hasta ahora con los derechos de la Liga. A este reto hay que sumar la incertidumbre que afronta la compañía con el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que se resolverá en los próximos meses. ¿Afectará todo esto al departamento de comunicación?
Esta semana Vodafone aprovechaba el tirón del lanzamiento de Netflix en España para presentar la promoción por la que la compañía ofrecía de manera gratuita seis meses el servicio de la plataforma de contenidos audiovisuales dentro de su oferta audiovisual. Además, Vodafone quiso sacar aún más réditos de la puesta de largo de Netflix, presentando la oferta de la Liga de fútbol dentro de su plataforma audiovisual. La idea sonaba bien, y la oportunidad para comunicar parecía perfecta. Sin embargo algo ha fallado. Lo que prometía ser una presentación a lo grande, quedó deslucida por algunos agravantes.
Lo cierto es que es que Vodafone, desde que a finales de julio se hiciese con la oferta de fútbol de la Liga parece no haber sacado todo el partido en términos de Comunicación como hubiera deseado. El equipo de comunicación de la empresa de telefonía admite la difícil gestión de un contenido nuevo para ellos, y quizá por ello han cometido algunos errores de principiantes en la convocatoria a medios especializados del sector de la televisión y contenidos multimedia.
Gestión en plena crisis interna
Si a la falta de experiencia en la gestión de este tipo comunicación le sumamos el ERE que mantiene en vilo a Vodafone en España, parece que la cosa se complica. A principios de octubre la compañía de telefonía llegaba a un acuerdo con los sindicatos UGT y SCT, los que agrupan a la mayor parte de los trabajadores de la empresa en España, para proceder al ERE presentado por la compañía. Las negociaciones, según declaró su director de Comunicación a prnoticias, José Romero, ‘fueron muy satisfactorias’. De los 1.297 despidos plateados, se han reducido a 1050 y se han propuesto una serie de medidas como la compensación con 45 días por año trabajado antes de 2012 y 33 para los años posteriores, así como programas de ayuda al empleo durante 9 meses, entre otras. Esta misma semana, se conocía que 670 trabajadores de Vodafone han presentado su baja de forma voluntaria, aunque la compañía tendrá que estudiar si todas estas bajas son procedentes, al haber algunos ‘puestos estratégicos’. La gran pregunta que se hacen algunos es si los despidos afectarán a la ya difícil comunicación de Vodafone en estos momentos.
