Vivimos en un mundo donde la inmediatez es casi una obsesión y una tendencia constante. Afecta al ámbito personal, pero también al profesional y a veces las prisas por ser el primero pueden jugarnos malas pasadas. Y sino que se lo digan a los medios de comunicación, que tampoco se libran de cometer errores por esta causa. La premisa de publicar informaciones antes que la competencia puede desembocar en errores que posteriormente tienen que ser corregidos, pero que se expanden en cuestión de segundos por internet y por las redes sociales.
Este lunes ha vuelto a quedar patente con dos ejemplos muy claros. El primero la muerte de Sebastián Palomo Linares y el segundo la imputación de Eduardo Zaplana en la Operación Lezo. Ha sido una mañana muy intensa en las redacciones y en todas se han han visto obligadas a cambiar titulares y actualizar textos. Los medios se han apresurado a anunciar la muerte del diestro cuando realmente aún no se había producido el fallecimiento oficial. La propia familia ha tenido que desmentir la triste noticia que finalmente se ha confirmado a primera hora de esta tarde.
#Rectificación El entorno de Palomo Linares desmiente la muerte del diestro, está en estado crítico #HoyNoticia24A https://t.co/qQuNjJRq7n
— Hoy es Noticia (@HoyNoticia13tv) 24 de abril de 2017
Las emisoras de radio también han mandado alertas con la muerte de Palomo Linares y los diarios digitales han situado la noticia en la parte destacada de sus webs. Los titulares que anunciaban la muerte han sido modificados por otros que indicaban la gravedad de la situación del diestro, aunque no su fallecimiento.
Lo mismo ha ocurrido con Eduardo Zaplana. El expopular ha sido protagonista por su presunta implicación en la Operación Lezo y decimos presunta puesto que después hemos conocido que la imputación aún no existe y que por el momento está siendo investigado por el juez Eloy Velasco. Todos los medios han tenido que rectificar sus textos al igual que ha pasado con Palomo Linares.
Seguiremos Informando…