La Ministra de Economía y Empresa habría adquirido una vivienda a través de una sociedad instrumental, que habría creado junto a su esposo. Así lo ha revelado hoy el diario ABC en una exclusiva que indica que, a través de este procedimiento, se hubiera ahorrado el pago de miles de euros en impuestos desde su adquisición en el año 2000.
De confirmarse este hecho, Calviño sería la tercera persona del gabinete de Pedro Sánchez que utiliza una sociedad para adquirir una vivienda después de los de Máxim Huerta y Pedro Duque; además, esta misma semana se conocía que la Presidenta del Consejo Superior de Deportes, María José Rienda, también utilizó una sociedad para administrar los ingresos relativos a sus patrocinadores deportivos y los premios que obtenía y, a través de la misma, había adquirido también inmuebles.
La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha sido cuestionada sobre si estas informaciones perjudican la imagen del Gobierno y si éste mantiene su confianza en Calviño. Celaá ha afirmado que la “imagen del Gobierno está intacta” y que “respalda” las explicaciones ofrecidas por el Ministerio de Economía. Fuentes del mismo únicamente han señalado que “su vinculación con esa sociedad es cero” porque dejó de tener relación con la misma en el año 2004.
Hay que recordar que la aparición de estas sociedades deja especialmente en evidencia al Presidente del Gobierno puesto que fue Pedro Sánchez quien declaró que que “es inmoral tener al número tres de tu organización que ha creado una sociedad interpuesta para tributar la mitad de lo que le correspondería. Esa persona al día siguiente estaría fuera de mi Ejecutiva”. Esta frase, pronunciada en referencia a Juan Carlos Monedero, le ha perseguido cada vez que se ha dado a conocer cada uno de los casos: Máxim Huerta, Pedro Duque, María José Rienda, Nadia Calviño…
Evolución
En todo caso, parece claro que ha habido una evolución en la forma que el Gobierno se ha pronunciado sobre las informaciones de estas sociedades que aparecían en los medios. En el caso de los ministros, el primero fue Máxim Huerta, quien además había sido condenado por Hacienda; a éste se le permitió hacer declaraciones en diversos medios durante algunos días y defenderse incluso haciendo alusión a las conversaciones que había mantenido con el presidente Pedro Sánchez: “El presidente me ha dicho esta mañana que nuestro objetivo es seguir trabajando y ser transparentes” llegó a decir a los micrófonos de Onda Cero. Apenas unos días después, terminaría dimitiendo.
Meses después, se conocería el caso de Pedro Duque, quien también a través de una sociedad habría adquirido inmuebles. En este caso, su equipo de comunicación decidió que compareciese ante la prensa para dar las explicaciones oportunas; lo hizo apenas unas horas después de que saliese a la luz la información y en solitario. Este hecho provocó que apenas pudiera defenderse con datos fehacientes, por no tenerlos, y en un claro ambiente de nerviosismo. Este hecho dejó tocada la imagen del ministro, que semanas después publicaba la resolución de un estudio jurídico que él mismo había encargado; en el mismo, se insinuaba que había pagado más impuestos de los que le hubieran correspondido abonar si no hubiera creado la sociedad.
Hoy, los equipos de comunicación ya no han permitido a la ministra Calviño salir ante los medios para dar explicaciones y estos se han tenido que conformar con un escueto comentario de fuentes del ministerio indicando que no tiene ninguna relación con la sociedad desde 2004. Habrá que ver cómo evoluciona la polémica y si Pedro Sánchez se reúne con Calviño en solitario para tratar el tema cuando regrese de Guatemala.
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