BUENOS AIRES (19/04/06) Ya hemos dado cuenta en varias ocasiones de las constantes críticas con las que periódicamente el presidente argentino Néstor Kirchner arremete contra la prensa nacional. A juicio del mandatario, en su país hacen falta “plumas serias y responsables” y aseguró que no teme “a ninguna coración ni al otunismo de quienes quieren hacerse un nombre en el periodismo insultando o agraviando al Gobierno”.
A continuación, el mandatario, que desde que asumió el cargo ha optado no conceder ninguna entrevista y comunicarse con los medios a través de los actos de agenda, agrego: “Algunos periodistas dicen que se esta violando la libertad de prensa. No podemos pensar distinto de lo que plantean que entonces somos autoritarios”.
Kirchner considera que existen sectores a los que les interesa más el fracaso que el éxito de sus conciudadanos y responsabilizó también a la prensa argentina de los hechos ocurridos en la década de los noventa, que derivaron en la posterior debacle económica y social que afectó al país. “La responsabilidad de lo que le pasó a la Argentina no es solamente de la dirigencia política, sino también de los medios y de muchos periodistas que acompañaron la década del noventa y el desastre de la Argentina”.
Bajo nivel intelectual
El mandatario, que no logra aceptar las opiniones críticas respecto de su gestión que aparecen en las páginas de los medios nacionales, también se permitió criticar el nivel intelectual de los periodistas de su país. “Hay muchos artículos que dan pena el poco nivel intelectual e investigativo y el poco acompañamiento con la verdad”, y consideró que a Argentina “le hacen falta plumas serias, responsables y fundadas”.
¿Es justificada la reacción de Kirchner contra la prensa argentina? ¿Está exagerando? ¿Es una obsesión? No lo sabemos, pero lo cierto es que lo que lee en la prensa le provoca tal disgusto que no puede evitar “regalarnos” periódicamente sus frases en descrédito de los medios de comunicación nacionales.
