TEGUCIGALPA (15/05/06) La periodista Wendy Guerra, destituida el 24 de abril pasado del Canal 49 de la localidad hondureña de Santa Rosa de Copán, fue reintegrada nuevamente a sus funciones tras la alerta emitida a nivel nacional e internacional denunciando su caso de la que PRLatam se hizo eco. El gatillante de su salida fueron las presiones de políticos locales.
TEGUCIGALPA (15/05/06) La periodista Wendy Guerra, destituida el 24 de abril pasado del Canal 49 de la localidad hondureña de Santa Rosa de Copán, fue reintegrada nuevamente a sus funciones tras la alerta emitida a nivel nacional e internacional denunciando su caso de la que PRLatam se hizo eco. El gatillante de su salida fueron las presiones políticas de las autoridades locales.
En una entrevista telefónica concedida al Comité la Libre Expresión (CLibre), Guerra dijo que el reintegro a su trabajo se produjo el 3 de mayo, fecha en que se conmemora el Día Mundial de la Libertad de Prensa, cuando la empresa le pidió disculpas y llegaorn a un acuerdo laboral satisfactorio para ambas partes.
Según Guerra, la denuncia de la arbitrariedad de su salida laboral generó reacciones inesperadas para ella no sólo a nivel local, sino también nacional e internacional y otros gestos solidarios. “Yo estoy muy agradecida la solidaridad recibida, las alertas difundidas CLibre, Reteros sin Fronteras y la organización PROBIDAD, así como el apoyo de mi gremio y la ciudadanía de Santa Rosa de Copán. Los ejecutivos del Canal 49 se disculparon y alegaron que había sido un ‘mal entendido’, pero la acción se produjo y hemos acordado respeto en el desempeño de las relaciones laborales y profesionales”, dijo Guerra.
La comunicadora fue despedida del Canal 49 el dueño de la empresa, el ex diputado del Partido Liberal Amid Cárdenas, en represalia difundir una información de la municipalidad en la cual se daba cuenta de la oposición de tres regidores del municipio a la construcción de un proyecto detivo para la juventud. La fuente de la comunicadora fueron las actas de la sesión municipal, donde se confirmaba que tres regidores de los 10 votaron en contra.
Cárdenas manifestó a la periodista que su accionar le generaba problemas con sus “amigos” del partido y del Gobierno, ya que éstos podrían decidir no darle más publicidad. Adicionalmente, el ex parlamentario redactó una carta que envío a Guerra y a los regidores aludidos en la que manifestaba su deseo de despedirla y cerrar su programa.
La reacción internacional no se hizo esperar y varias asociaciones en defensa de la libertad de prensa difundieron los menores de salida irregular de la comunicadora. La acción conjunta de los medios internacionales culminó con la reincoración de Wendy Guerra a su lugar de trabajo, poniendo punto final a este caso de intidación al ejercicio periodístico.
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