El 10 de enero, el director general de Patronio Cultural del Área de Las Artes, Juan José Echeverría, junto al escritor Luis Deltell y al director de la Escuela de Cinematografía, Fernando Méndez Leite, ha presentado el libro Madrid en el cine de la década de los cincuenta.
La obra, editada en colaboración con la Fundación Caja Madrid supone una aproxación a la producción de cine español durante la década de los años cincuenta, uno de los más tantes de la historia reciente del cine español y que además se caracterizó un aumento de la aceptación de las películas parte de los espectadores españoles.
El periodo entre 1950 y 1960 ha sido uno de los más tratados los expertos y estudiosos del cine español. Esta década supuso un hito en el cine nacional. El cine español de los 50 bebe de uno de los géneros más ricos del cine europeo, como fue el realismo. Este género llegará a los creadores españoles como una tante fuente de inspiración y así directores como Edgar Neville, Juan Antonio Bardem, Berlanga o Saura firmarán en estos años algunas de sus películas más tantes bajo el halo de este género también conocido como cine “disidente” o “social”.
Esta obra analiza en prer término como evolucionó este realismo español. Así, la prera parte del libro se estructura en tres etapas que recogen, respectivamente, los antecedentes en la década de los años 40 y el inicio del realismo en los cincuenta; la contaminación del realismo el sainete y el melodrama; y la aparición del desarrollismo y el cine grotesco.
La segunda parte se concentra en el protagonista de la Ciudad de Madrid como escenario de los rodajes de cine español durante los años 50. Bajo el epígrafe Madrid en los géneros cinematográficos, el libro aborda el retrato que de la urbe madrileña se hicieron en géneros como el cine histórico, el cine de propaganda, el cine negro, el religioso, la comedia, el cine social y los subgéneros de los toros y el fútbol.
Las calles y los barrios de Madrid serán testigo de los experentos realistas de los directores de la época, mientras que la evolución del género de la comedia debe gran parte de sus éxitos a personajes típicamente madrileños. Además todas estas películas recogerán algunos de los problemas y las preocupaciones fundamentales de los madrileños de la época, como el paro, la delincuencia o los problemas para conseguir una vivienda.
Como conclusión el libro analiza siete grandes obras cinematográficas de la época: El últo caballo (1950), de Edgar Neville; Surcos (1951), de José Antonio Nieves Conde; Esa pareja feliz (1951), de Luis García Berlanga y Juan Antonio Bardem; Historias de la radio (1954), de José Luis Sáenz de Heredia; Muerte de un ciclista (1955), de Juan Antonio Bardem; El pisito (1958), de Marco Ferreri, y Los golfos (1959), de Carlos Saura./
