El alcalde de Madrid, Alberto RuizGallardón, ha visitado esta mañana el programa ‘Las mañanas de Cuatro' para ser entrevistado la periodista Concha García Campoy. Con esta aparición, el alcalde madrileño ha querido dar la cara tras la polémica creada en el consistorio la semana pasada la presunta trama de corrupción y la cual cinco funcionarios han sido ya enviados a prisión. Gallardón ha hablado de éste y otros muchos temas. A lo largo de una media hora, la periodista Concha García Campoy ha abordado al alcalde de Madrid con los temas más candentes del momento, entre ellos, como no, el ocurrido en el consistorio madrileño durante la semana pasada. Gallardón ha querido dejar claro en todo momento la colaboración entre el ayuntamiento y la justicia. ‘Hemos trabajado conjuntamente con el juez para detener a los culpables que es nuestra responsabilidad', ha comentado.
A pesar de que no ha comentado nada nuevo, lo cierto es que ha reiterado lo ya comentado en muchos medios de comunicación, como la apertura de una comisión de investigación o la búsqueda de un sistema que agilice la concesión de licencias.
Otro de los temas más interesantes que se han tocado en la entrevista ha sido la querella que Gallardón mantiene con el periodista de la COPE, Federico Jénez Losantos, las continuas alusiones que éste realiza en contra del político. Hace unos días, PRMadrid os informaba de la cruzada que el polémico periodista mantenía contra Gallardón y la que existe una demanda. Por ello, no ha querido hacer ninguna alusión al tema y ha zanjado la polémica en cuanto ha podido.
Concha García Campoy también ha querido preguntarle los rumores que le sitúan en un puesto diferente al de alcalde, algo que Gallardón ha respondido con un ‘me gustaría entrar en política nacional. Es algo que nunca he negado'.
Ya al final de la entrevista, Gonzalo Miró, uno de los colaboradores de Campoy en el programa, ha entrado para mostrar al político las quejas de los ciudadanos de a pie, sobre todo aquellas relacionadas con la colocación de los súper chirbolos que tantos quebraderos de cabeza están dando al ayuntamiento. Gallardón ha admitido que se han equivocado con la ubicación de algunos de ellos y que están haciendo todo lo posible cambiarlos a otros lugares donde no molesten a los vecinos.