BROMAS, NI UNA

carlosdiazguell2007.jpg
Publicidad
Cargando…
Publicidad no disponible

 

Cae en mis manos lo de caer es un decir un documento de la Junta de Castilla la Mancha exactamente de la Delegación Provincial de Cultura de Toledo el que se ofrecen subvenciones, con arreglo a una orden cualquiera de hace un par de años, la contratación de profesionales relacionados con el patronio artístico.

Se trata de contratar licenciados en Historia, Arqueología, Humanidades o equivalentes, para ponerles a trabajar, y aunque las condiciones no son para tirar cohetes, ya que la duración máxa del contrato es de solo de seis meses,  y aunque de dinero no se dice nada, habrá que presuponer que estamos hablando de mileuristas. ¡Ya me dirán ustedes qué se puede hacer en seis meses cuando de lo que se trata es de recuperar algo que posiblemente tenga cientos de años de vida.

Es bueno de vez en cuando acercarse, aunque sea con cautela, a ese procelosos mundo de la contratación pública para comprobar hasta que punto, en aras de la igualdad de otunidades (sic) o de cualquier otro principio, muchas veces inconfesable, el sistema concentra en unos pocos pliegos todos los vicios acumulados a lo largo de décadas, hasta el extremo de que, a la postre, lo que menos interesa es la idoneidad o profesionalidad de  los candidatos a ocupar una determinada plaza.

Paso alto que para acceder al precario empleo pre estar desempleado mujeres prero,  sobre las capacidades técnicas del profesional que opta a tan efímero puesto; o que te den puntos, según los hijos que tengas, o cualquier otra cuestión que se haya considerado otuna, aunque nada tenga que ver con la preparación de los candidatos.

Pero lo que realmente me ha dejado fuera de juego y conmigo, me agino, a muchos aspirantes es una cláusula que dice que, "de acuerdo a lo establecido en la base 16ª de la Orden 4122006 tendrán preferencia absoluta en la contratación las personas víctas de violencia de género, y tendrán prioridad absoluta en la selección, quedando excluidas del requisito de la inscripción en el momento de la selección, no obstante previo a la formalización del contrato deberán inscribirse como demandante de empleo y carecer de ocupación".

Quiero ser cauto y más cuando se trata de un asunto especialmente lacerante de la sociedad en la que vivos. Creo que el sistema no debe reparar en medios para terminar con esa lacra machista y despreciable de la denominada violencia de género y que en aras a conseguir erradicar esos viles comtamientos se deben poner todos los medios judiciales, policiales, económicos y educacionales que sean necesarios.

Pero dicho esto, que alguien me explique qué relación existe entre recibir una paliza del descerebrado de turno y la rehabilitación de los frescos del siglo XVII que cubren los muros de una sinagoga de Toledo.

Me apetecería poner el punto final con comentarios crueles al calor de  esta solemne majadería burocrática propia de Caldera, pero me merecen demasiado respeto los componentes de la ecuación como para terminar con una chirigota. Posiblemente tendría todas las de perder. La demagogia y el populismo son malos enemigos, aunque dan votos a mogollón.

Carlos Díaz Güell es vicepresidente ejecutivo de Serfusión

Publicidad
Cargando…
Publicidad no disponible
Publicidad
Cargando…
Publicidad no disponible
Salir de la versión móvil