El próxo 7 de junio llega la Eurocopa. Con el afán de conseguir los mejores resultados nuestros jugadores ya se encuentran concentrados para sorprender sobre los terrenos de Austria y Suiza mientras que, desde las cocinas de las agencias se va fraguando un negocio paralelo pero, no menos tante, y es que, todos quieren sacar tajada del evento: hablamos del ambush g.
El origen del ambush g (práctica ilegal que permite a las marcas difundir sus mensajes en eventos masivos sin contar con los derechos de los patrocinadores oficiales) está ligado al incremento de popularidad de los Juegos Olímpicos y del dete en general, con el consiguiente aumento de la inversión en el patrocinio de estos eventos. Los datos indican que su origen podría remontarse a las olpiadas de Los Ángeles 1984.
Lo cierto es que el ambushing se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para todo para aquellos que legalmente atan dinero para convertirse en patrocinadores de un gran aconteciento detivo, emboscadas publicitarias a través de las cuales marcas no autorizadas adquieren presencia en eventos masivos, como pueden ser los próxos Juegos Olímpicos de Pekín o la Eurocopa de Fútbol, lo que expertos como la consultora detiva Fast Track consideran ‘una seria amenaza para el futuro y la continuidad de los patrocinadores en cualquier evento'.
Pero, ¿cómo evitar este tipo de situaciones? Javier Arroyo, socio director de la consultora que asesora a Madrid 2016, considera que ‘ enca de cualquier planteamiento teórico expuesto, debe regir una notoria y sólida voluntad a largo plazo parte de la propiedad, que debe consolidarse como guardián acérro de los intereses de sus patrocinadores'. En esta línea, fuentes de Santa Mónica Sts, empresa que gestiona la comunicación y organización empresarial de la Federación Española de Fútbol, han confirmado a prg que tanto sus servicios jurídicos como los de la federación y la FIFA ya están trabajando para parar los pies a todos aquellas marcas que se quieran embarcar en la técnica del ambushing.
Establecer un perímetro de seguridad alrededor del recinto donde tendrá lugar la competición que se reservará para las marcas de los patrocinadores oficiales, o dedicar los últos minutos de los espacios publicitarios anteriores y posteriores a las retransmisiones a los spots y carátulas de entrada y salida de los patrocinadores oficiales son algunas de las medidas que Arroyo nos propone para evitar situaciones como las vividas durante la últa edición de la America's Cup, donde se cubrieron todos los accesos principales al Puerto de Valencia, la publicidad en los edificios de la zona a su alrededor o prohibieron toda publicidad en los cascos de los barcos en las marinas, salvo las de los patrocinadores de los equipos.
A pesar de ello, habrá que ver si los cuatreros de la publicidad logran hacerse con las vacas gordas…
Seguiremos Informando…