Invertir en dete es, a día de hoy, el negocio más rentable a largo plazo. Mientras que de jóvenes tenemos la bolsa llena, no hacer ejercicio físico puede desembocar en una gran dependencia. Diversos estudios demuestran esta teoría y la Escuela de Estudios Universitarios Real MadridUniversidad Europea de Madrid invitó al doctor Mikel Izquierdo que, acompañado de Jorge Valdano y Don Alfredo Di Stefano, cambiaron el chip de los más jóvenes.
'Un entrenamiento físico relativamente intenso y adaptado a cada capacidad funcional puede prevenir o aminorar la pérdida de fuerza y masa muscular en las personas mayores'. Esto explicó el doctor Mikel Izquierdo, profesor titular de Biomecánica de la Actividad Física y el Dete de la Universidad de León, durante la conferencia Dete y Tercera Edad: Ejercicio físico, una forma saludable de evitar la dependencia, celebrada en el Santiago Bernabéu con la presencia de Jorge Valdano, Director General de la Escuela de Estudios Universitario Real MadridUniversidad Europeo de Madrid y Don Alfredo Di Stefano, Presidente de Honor de la entidad detiva y Leyenda cuyo nombre lleva uno de los MBA que ofrece la Escuela.
Con el paso de los años las personas reducos nuestra actividad física hasta casi anularla. Sólo el envejeciento disminuye en un 45% la resistencia aeróbica, un 40% la fuerza de agarre de las manos, un 70% la fuerza de las piernas, un 50% la movilidad articular y un 90% la coordinación neuromuscular. El dete se convierte en una de las mejores medicinas contra las enfermedades cardiovasculares y la dependencia. Unir medicina y dete es el reto de los próxos años. De momento, apunta el doctor Izquierdo, 'la medicina sabe muy poco de ejercicio físico y los detistas muy poco de enfermedad'.
Diversos estudios han mostrado que un entrenamiento físico adecuado 'recupera la capacidad funcional y la potencia muscular de veinte años antes'. El doctor Izquierdo advierte que, si no se hace ejercicio, 'hacia los 7585 años la fuerza de las piernas y los brazos puede reducirse tanto que la persona no pueda levantarse sí misma de la cama o del sillón'. Por ello, recomienda a las personas mayores de 55 años realizar al menos dos veces a la semana entrenamientos de resistencia aeróbica moderada, como caminar o nadar, complementando este entrenamiento con ejercicios de fuerza y flexibilidad.
Jorge Valdano, detista desde siempre y ahora Director General de la Escuela de Estudios Universitarios Real MadridUniversidad Europea de Madrid, habla de los beneficios del dete, en prer lugar, 'derivados del moviento físico, que permiten a los grupos de edad alejarse del sedentarismo y les ayuda a mantenerse activos' y, otra parte, 'del poder socializador que, en la medida en que se realiza ejercicio físico en compañía, se crea una complicidad que prociona tantes recompensas en la Salud mental'.
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