BENITIÑO FREIRE

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Se fue de su bosque encantado directamente al cielo de la mano de la Santa Compaña que merodea las casas de la anas en pena. Hoy es ya una leyenda y mañana un ejemplo a seguir los cientos de cómicos que intentarán ser José Luis López Vázquez.sin conseguirlo Inmenso como actor, nos hizo reír como pocos y emocionarnos con personajes de carácter que solo los privilegiados saben interpretar. Cuando me enteré la radio, ¡siempre la radio!, de su inesperada muerte, me vinieron a la memoria ágnes de aquel irrepetible firmamento de genios como Pepe Isbert, Luis Ozores, Fernando Fernan Gomez o Manolo Morán el mejor guardia de la ra que  ha existido nunca, que en mi niñez de cine en el Yago me hacían reír con ganas y que luego fueron desapareciendo para dar paso a los Landa, Sacristán, Sazatornil o Agustin González poner ejemplos facilotes, resabidos todos. Y sin embargo, Lopez Vazquez ha estado al lado de ellos y muchas veces enca. Apellidarse Lopez  y Vazquez no será muy de artista de Hollywood, pero lo que se ha visto, mas que suficiente para que varias generaciones a los que nos  gusta el cine nos sintamos orgullosos y agradecidos de haber conocido tanto talento y haber podido disfrutar de él. Como gallego, siempre recordaré a ese Benitiño, mitad hombre y mitad lobo, al que supo dar vida entre la brétema y el orbayo de mi Galicia natal. Inconmensurable en su papel y lo que es mejor, genial como persona. Cada uno tendrá sus recuerdos preferidos, pero siempre con un único denominador comun:el del inconfundible sello del entrañable señor bajito y con bigote que nunca nos defraudó.

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