Café ‘aliñado’ con taxis en el Congreso de la SEOM en Málaga

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Quedada en la estación Atocha de Madrid y dirección a Málaga. Tras prácticamente todo el trayecto en el vagóncafetería, llegamos a la ciudad con el cansancio en el cuerpo de una larga jornada de trabajo. Sin embargo, nos esperaba la cena en el típico restaurante andaluz. Conciliación familiar, trabajo y lo que nos depararía el día de mañana protagonizaron la velada.

 

Miércoles 19 y a las 9:00 de la mañana, desayuno y de ahí corriendo al XIII Congreso de la Sociedad Española de Oncología Médica, en el Palacio de Ferias y Congresos de la ciudad. Un recinto nuevo y espacioso, con un diseño singular, que acoge la presentación de 180 ponentes y 1.000 asistentes entre el 19 y 21 de octubre. Miramos asombrados y afrontamos el nuevo día. Todos para adentro.

 

Entrada y carrera hasta la sala donde se celebraba la rueda de prensa previa. Grabadoras y libretas en mano, acudos posteriormente a la mesa redonda ‘La atención a los largos supervivientes de cáncer, un debate necesario’, organizada la SEOM, en colaboración con Roche, y que contaba con la participación de José Luis de la Serna, subdirector de El Mundo, y Ángel Escalera, redactor de Diario Sur de Málaga, para atar el punto de vista periodístico.

 

Cóctel y dispersión ante la petición de entrevistas. Entre tiempo y tiempo, vuelta la Exposición. Tras un largo paseo con folletos, notas de prensa, estudios y dossiers, conseguos una pequeña maleta con ruedas. Más ligeros y ante una hora libre, visita rápida la ‘milla de oro’ malagueña. Alguna que otra compra de últa hora… y algún que otro taxi que nos llevase corriendo al Ave. Y digo corriendo que llegamos prácticamente 10 minutos antes de que se pusiera en marcha. ¿Largo viaje hasta Madrid? De eso nada, como buenos periodistas la cafetería es una gran punto de encuentro, así que volvemos al café caliente, la cocacola y el bocata.

 

Llegada a Madrid con el calorcito andaluz aún metido en el cuerpo, nada que ver con fuerte bajada de temperatura que ha sufrido la capital de un día para otro. Fin de un viaje que termina con mucho que escribir y con mucho más que contar.

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