Los expertos recuerdan a los pacientes diabéticos musulmanes los riesgos de ayunar

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Los pacientes diabéticos que toman fármacos con capacidad hipoglucemiante, que decidan ayunar y, tanto, no ingieran alentos durante horas, pueden sufrir complicaciones agudas como hipoglucemias e hiperglucemias si no mantienen un estricto control de la enfermedad y, en casos extremos, una situación de gravedad que requiera el ingreso hospitalario’. Estos son, según el Dr. Josep Franch, Médico de Familia del Centre de Salut Raval Sud (Barcelona), los principales riesgos a los que se enfrentan los musulmanes diabéticos que decidan cumplir con el ayuno que dicta su religión durante el mes del Ramadán, que este año empieza el 9 de julio y termina el 8 de agosto.

 

En España, hay algo más de 1.671.000 de musulmanes, siendo Cataluña (448.879), Andalucía (266.421) y la Comunidad de Madrid (249.643) las comunidades autónomas con más población musulmana. Teniendo en cuenta que, según el estudio Di@bet.es, la prevalencia de la diabetes tipo 2 en la población española mayor de 18 años se sitúa en el 13,8%, se esta que alrededor de 230.000 personas diabéticas en nuestro país deben decidir si cumplen o no con el ayuno que les pone su religión, asumiendo así los riesgos y la responsabilidad que conlleva.

 

Como parte de su compromiso con la salud y con el objetivo de ayudar a estos pacientes en la toma y el manejo de esta decisión, la compañía farmacéutica MSD ha elaborado segundo año consecutivo los materiales “Las realidades del ayuno durante el Ramadán” para personas con diabetes tipo 2, donde se explican los riesgos así como los pasos a seguir para prepararse. Estos materiales, basados en las Recomendaciones para el manejo de la diabetes durante el Ramadán de la Asociación Americana de la Diabetes (ADA), cuentan con el aval de la Federación de Diabéticos Españoles (FEDE).

 

Aunque se trata de una decisión personal, ésta debe tomarse con el consejo y el apoyo del médico. Según Ángel Cabrera, presidente de FEDE, “con la llegada del Ramadán, las personas musulmanas diabéticas que practican el ayuno deben extremar las precauciones, para no agravar su estado de salud. Pero lo fundamental, antes de nada, es trasladar a su médico su intención de ayunar, para recibir una orientación, ya que cada caso requiere siempre una individualización, sobre todo teniendo en cuenta su tratamiento: si es con insulina, o si es mediante alentación y antidiabéticos orales”.

 

En la misma línea se pronuncia el Dr. Franch, quien explica que la evaluación médica previa permitirá dar a cada paciente las pautas personalizadas que le ayudarán a minizar los riesgos, “atándole toda la información sobre los fármacos que está tomando, la alentación que debe seguir y la actividad física que debe realizar” apunta el doctor.

 

Comer de forma sana y equilibrada es una de las pautas recogidas en el material que se ha desarrollado para pacientes. Así, se recomienda comer alentos como el trigo, la sémola y las judías durante el Suhoor (la comida antes de que salga el sol y empiece el ayuno)3, ya que se trata de “alentos que contienen hidratos de carbono de absorción lenta y con alta proción de fibra, que asegura un ate lento de glucosa al organismo” apunta el Dr. Franch.

 

Por el contrario, en el Iftaar (la comida que se realiza una vez se ha puesto el sol y con la que termina el ayuno), es aconsejable comer alentos que liberen azúcar rápidamente, como la fruta, para ayudar a recuperar el nivel glucémico, y a continuación hidratos de carbono de acción lenta. Por últo, es preferible evitar alentos con un índice alto de grasas saturadas (manteca, samosas y pakoras) o azúcares e intentar dividir las calorías en varias comidas a lo largo de las horas en las que no se ayune3, 4.

 

Seguiremos informando…


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