Todo el mundo con el que hablo, da igual que sea el conductor del autobús, que ve muy lejos volver a vacacionar un mes en el Caribe, como el inversor de los dineros de terceros… todos coinciden en señalar que: ‘no entendemos qué está pasando en el mundo’. De repente, sube un señor con ataque de nervios y con mascarilla, alguien había estornudado a su lado, y, sin pedir perdón, ni protegerse… ¿Histeria colectiva? No, la realidad es que forma parte de las anormalidades a las que nos vamos acostumbrando, por lo que los anormales, debemos ser los que no llevamos mascarilla, o, sólo la usamos para evitar oler los pies de desconsiderados (jajajajaja sin indicación de sexo, ni procedencia). Se agotaron las mascarillas, que en el caso de los sanos, no sirve para nada, y en el caso de los que las necesitan (salud, aeropuertos, servicios públicos, o enfermos que las necesitan), ven como su precio se multiplica por cien, que los de siempre, los oportunistas, los mediadores, hacen que se pase de pagar 0.30 por mascarilla a 30 euros, y hay todavía inconscientes que las compran. Las indicaciones son claras, la forma de propagarse, también. Sólo hace falta abrir las orejas y escuchar, y, aquellos que quieran alarmar, que piensen, en la fortuna de todos que caducó en los anaqueles de la Seguridad Social (que no es igual para todos), se trataba de un montón de millones en vacunas que nunca hicieron falta, pero seguro que si se investiga detrás de todo este turbio asunto, que ha pasado inadvertido para mis compañeros, seguro que hay alguien de laboratorio y Administración, que celebraron por todo lo alto la compra compulsiva del Estado. ¿Hubo devolución? Se reinvirtió para… ¡Nada de nada, dinero público a la basura1
Ahora con el montaje de la ‘Mesilla’, para que Sánchez pueda dormir, perdemos del retrovisor la decisión de ceder la Seguridad Social, su gestión pura, sus dineros al maldito PNV, que siempre está para negociar para ellos, los españoles, el resto de los españoles, les importamos una mierda. Y, esta desigualdad consentida y sabida, me trae a la memoria un oftalmólogo u oftalmóloga, porque se me presentó de las dos formas… Y os cuento, Nicolás mi hijo pequeño, se había peleado con Neptuno, perdió, y como venganza le llenó los ojos de arena, conchitas… hasta mejillones tenía la criatura… Estábamos en las amadas Islas Canarias, en Gran Canaria, y el problema era que ‘Madrid no estaba cumpliendo el convenio, y no pagaba’. Y, a mi ¡qué coño me estás contando lo que pague o no pague Madrid, lo que me importa es el ojo de mi hijo! En su situación había otro infante de la misma pelea y con una situación parecida (heridas en globo, retina…) Tuve que tomar la decisión de acercarme a la gasolinera de al lado de las urgencias, compré una lata con 98 octanos, y me marché a preguntar por el Ser oftalmológico, y el gerente del hospital, que entendió mi angustia, y al pronto le limpiaron el ojo, le aplicaron una semana de antibiótico, y resolví nuestro problema, el de al lado trabaja hoy en la ONCE, con un resto visual de 5%. Sus padres eran más flemáticos.
Una de mis ocupaciones, para el que no tenga noticias mías desde hace casi seis años, es ayudar a los enfermos crónicos a cuidar su estado de salud, y en particular con amputados y diabéticos. Pues bien, hace unas semanas, que una española de Asturias, con una pensión que no llega a los 300 euros, y después de consultar con los médicos especialistas, y, ante una enfermedad degenerativa, dolorosa y persistente, decidieron que podía mejorar su estado general, como así ha sido, y que la aplicación de Medicina Hiperbárica le ayudaría con el sostenimiento y mejora de su estado, que, como comentaba, es bastante delicado. Esta buena señora venía becada por Fundación CaixaBank, y Fundación AMA. Ha tenido la necesidad, sin mascarilla, de pasar por el médico en Madrid, para que le hiciesen un control, y no sabe cómo hacer, dónde ir… Porque no ha hecho el traslado de su cartilla (durante 3 días), y la noticia que recibe de la Súper Administración Asturiana, a la que ahora sólo importa recuperar la ‘lengua’ para ponerse a la altura del resto de independentistas, que así se empieza, ha sido que se vuelva a los prados asturianos… Pero, ¿será primero la salud de los paisanos?, o por venir a la Capital tres días la tienen que dejar sin atención primaria, y con la amenaza de retirarle la ayuda para la que ha trabajado toda su vida. Menos mal que en Asturias está el ‘Trasgu del Oxígeno’, el gran Oliverio Calzón, con sus clínicas, y, que a buen seguro, acabará el tratamiento de esta santa…
Hace muchos años que Luis del Olmo decía: ‘Que los que hablaban de persecución e inmersión lingüística en Cataluña eran unos mentirosos’. Pujol, el mafioso, padre de mafiosos, acababa de conceder al incólume de Luis, una emisora a mayor gloria de la ‘Libertad de Su Expresión’. Así se ha hecho, y se hace España cuando es menester. Nuestro problema de incomprendidos es que tenemos que sufrir por los muertos de la Guerra Civil, que pasó hace 100 años, y perdonamos haciendo Ministros a consentidores de la pederastia, en tiempos del dictador. En España se juzga a los políticos y se condena al portero, cuando no al juez. Porque las penas de los golpistas catalanes, ¿en qué quedaron?
Vuelva a Asturias bella señora, cuente que lo que aquí ha conseguido, que ha sido: dormir, desinflamar sus articulaciones, doblar las rodillas sin problema, caminar sin cansarse, reparar y fortalecer su sistema inmune… Y, que no le quiten la pensión, que para eso crió sola, también en época del dictador (que era mucho más difícil, casi imposible), a tres flores que hoy la adornan, quieren, respetan y cuidan.
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pedro aparicio pérez
Portador del gen recesivo de Chirli
Editor de prnoticias.com
PeriodistO {wbamp-show start}