Un tertuliano en mi vida

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Mi padre, que es un señor de derechas, me regañó ayer por discutirle por qué tenía que pagar por los contenidos del Abc si yo siempre los había visto gratis en casa. Y su respuesta no admitió argumentos: “porque lo hemos comprado siempre, desde tus abuelos, y es un periódico como Dios manda”. 
Ante tan aplastante afirmación no me quedó más remedio que pensármelo pero, claro, dije yo: ¿para qué pagar por tantos periódicos si ya tengo a toda la pasarela de tertulianos en las teles? 
Mi padre se aferra al Abc como a la Biblia y no le basta con ver o escuchar a Bieito Rubido en los programas. Quiere leer también las esquelas, que siempre fue la manera de seguir de verdad la vida social de España. 
Pero yo que sorteo la segunda crisis económica de mi vida no veo para qué dejarme una pasta por leer todos los periódicos cuando Marhuenda me lo cuenta todo en mis dispositivos. A primera hora en la radio, a media mañana en las televisiones, por la noche en los debates….No hay lugar en casa donde no aparezca el director de La Razón. Un día cogí el mando del aire acondicionado y creí leer en una tecla “Paco Marhuenda”, y deduje: esto son las cookies, que de eso Marhuenda también sabe porque es muy catedrático. Los multitertulianos atraviesan los muros de pago y se cuelan en tu vida doméstica como la pastilla de jabón. 
Alexia ya conecta directamente con Inda en su periplo mediático. Es más, le decimos “Alexia pon a Casimiro”, pero nada, ella sólo hace caso a Inda. Ana Rosa, Federico, Al Rojo Vivo (“qué tal Don Antonio”) La Sexta Noche, los deportes. 
La semana pasada le ordené a Alexia que programara la misa de 13 tv y me dijo que Inda no había acudido y sufrí una gran conmoción. Perdidos estábamos en casa sin Inda en el púlpito ese día. 
Yo creo que en vez de muro de pago, los editores deberían ofrecernos un 
NewsFlix donde poder elegir al opinador que queremos para enterarnos de las noticias. Incluso podríamos programarlos en función de nuestro estado de ánimo y pasar a Jesús Maraña a la hora de la siesta para nuestra tranquilidad o Nacho Escolar al fin de semana para ver toda la saga de Master. 
Lo mismo, a más de un editor, el NewsFlix le salvaba el ejercicio. 

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