Sorprendidos del Truco: se acabó la monarquía

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En nuestra querida y divertida España, en la que tenemos la ‘mejor sanidad del mundo subdesarrollado’, los españoles son, en materia de estado, de tres tipos: los hay monárquicos, republicanos, y de los que no son de nada, pero que podríamos llamar los ‘sorprendidos del truco’, que son una inmensa mayoría. Porque en cualquiera de los primeros dos casos expuestos, existe la manga ancha para que los delitos pasen a ser acciones, y las acciones en dólares de Panamá, a no ser que sean de la cajera con carrera o del emetérito, o del dinero mandado por Nicolás el farlopero. Sólo pensando en que Echenique hoy ha convocado a su círculo de cercanos, hace temblar las canillas y el sistema eléctrico y la agenda interurbana. ¿Para qué? Pues para anunciar que se va a crear una nueva campaña de desprestigio… Lo de disparar a una foto debería ser castigado con la pena máxima: ‘Máximas risas entre el personal, e investigación por si hay maldad, dolo o intención’. Quemar la bandera de España, al Rey o a su puñetero y emetérito padre, no tiene precio, ¿para lo demás?, Sánchez. Que, por cierto, se postularía, junto a José Luis Rodríguez Zapatero, como dos de los candidatos de confianza del pujante eje cubano/bolivariano/y de las Jons, para residir en ¿La Zarzuela? Pos vale… Hoy se lleva Putin, pues entonces en el Canto del Pico…

Pues eso, que los españoles de a pie ya no sabemos que coño es lo próximo que está por llegar. La economía anuncia lo peor, los ministros siguen a su bola, España a la suya… Sánchez intentando conseguir los FONDOS PARA LA RECONSTRUCCIÓN Y PERPETUACIÓN DEL SANCHISMO, y los pobres ‘sorprendidos del truco’ siguen esperando a que se les ordene lo que es mejor para destruir su maltrecho estado de la cuestión. No soy monárquico, la inteligencia no se hereda. No soy republicano, los españoles son dictadores y sólo ven por un ojo. No estoy sorprendido, estoy ALUCINADO de la capacidad de manipular a las masas y de que la gente piense que yendo a la playa o al pueblo… Es una mentira a nivel sideral. Mientras la enfermedad exista en el ambiente, España no va a cambiar, la tentación es que Sánchez está fuerte y pacta con todo, con tal de conseguir que todo lo que conocíamos desaparezca, eso sí despacito y como algo natural… Hay quien ha despedido a sus NO MUERTOS, como cuando se despacha cuarto y mitad en el ultramarinos que llenaron de amor, esos anaqueles que nos salvaron de la tragedia… Esto, lo de quemar la Tierra, también lo hace Bolsonaro… ¡Qué mundo de hijos de puta!

pedro aparicio pérez

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