IMF Institución Académica radiografía a la mujer emprendedora del siglo XXI

Publicidad

Madrid, 18 de noviembre de 2020. Con motivo del Día Internacional de la Mujer Emprendedora, que se celebra el próximo jueves 19 de noviembre, IMF Institución Académica ha querido realizar una radiografía del perfil de la mujer emprendedora del siglo XXI. Para ello, ha creado el ebook Radiografía de la Mujer Emprendedora en España, en el que recoge los testimonios y experiencias de cuatro mujeres que regentan su propio negocio y que han analizado las principales claves para llegar a convertirse en “líderes de su destino”, como define Belén Arcones, Directora General de la institución. Junto a ella, han participado Miriam Ferrer, fundadora de Telco Customer Care; Lupina Iturriaga, de Fintonic; y Cristina Porta, creadora de Autocines Madrid.

En España, 650.000 mujereshan creado su propio negocio, y, según el último informe GEM 2019-2020 sobre emprendimiento, el 48% de los que han creado su negocio son mujeres. Asimismo, mientras en 2001 las mujeres emprendían el 71% de lo que lo hacían los hombres (ratio de 0,71), en 2019 ese porcentaje se sitúa en el 94%.

Anna Conte, directora general de la revista Mujer Emprendedora, explica cómo las empresas lideradas por mujeres han crecido de manera exponencial en todos los sentidos en los últimos años. “En la actualidad, ha aumentado nuestra presencia en sectores hasta ahora más masculinos, incluso con significativa presencia en mercados internacionales y con una participación activa en las organizaciones empresariales”. Y continúa: “Las compañías lideradas por mujeres tienen también un gran potencial de desarrollo a futuro”.

Cómo es el ADN de la mujer emprendedora.

Tal y como refleja el informe del GEM 2019-2020, las mujeres en nuestro país emprenden con una media de edad entre 24 a 35 años, de las que el 50% cuenta con estudios superiores. Algo fundamental, como destaca Belén Arcones: “Cuando alguien me pide consejo sobre qué hacer a la hora de emprender, lo primero que le pregunto es si realmente está preparado. Yo es lo primero que hice. Al principio, me di cuenta de que el mayor gasto que teníamos en IMF Institución Académica era en marketing y publicidad, así que es en lo que me formé y creamos para ello un máster específico para conocer las claves y las palancas que mueven ese mundo. Y nunca he dejado de seguir aprendiendo y formándome. No creo en el profesional que no lo hace”.

En el caso de Miriam Ferrer, fueron más importantes sus ganas de lanzarse a la aventura de emprender: “Este paso de emprender me encendió la chispa del querer aprender, cultivarme y crecer tanto profesional como personalmente. Mi lema es ¡Aprender! Ya sabía de operaciones, pero no de negocio”, explica.

Lupina, por su parte, explica cómo fue importante su formación y los reconocimientos a sus esfuerzos a lo largo de su trayectoria. “En 2018, recibí el reconocimiento a la Mejor Carrera Profesional CUNEF, del que estoy especialmente orgullosa. También me siento muy afortunada de haber sido reconocida por Financial Times como una de las 15 mujeres referentes del mundo fintech en Europa y de que la revista Forbes me eligiera entre las 100 personas más creativas en business”.

Para Cristina Porta, nutrirse de diversos puntos de vista ha sido clave, hecho que ha alimentado sus ganas de emprender: “Mi experiencia profesional en diferentes ámbitos me ha brindado la oportunidad de conocer a excelentes profesionales procedentes de todo el mundo y con culturas, formación, intereses, experiencias y aspiraciones muy diversas. Este entorno me ha aportado una amplia visión de negocios y ha fortalecido mi interés por la creación de empresas por cuenta propia”.

Superación y desarrollo, ingredientes imprescindibles.  

El perfeccionismo y el buen hacer son dos ingredientes claves para el éxito de estos proyectos. La mujer emprendedora se caracteriza, esencialmente, por tener un espíritu proactivo y muy positivo, por ser capaz de analizar las posibilidades que tiene a su alcance y por tomar las decisiones pertinentes para avanzar en su camino de emprendimiento.

En el caso Miriam y su empresa Telco Customer Care, su primer y único proyecto, su deseo por sacarlo adelante no cesó, a pesar de encontrar alguna que otra complicación: “El éxito es tener claro qué quieres y qué no quieres ser, y no desfallecer ante los fracasos. Esa mentalidad de crecimiento tan necesaria para perseguir el éxito pocas veces la perdí, y siempre encontré a mi lado a la persona que me empujaba a ello”.

Para Lupina, la superación de retos es algo fundamental: “Como persona, trato de seguir poniendo ilusión a todo lo que hago, disfrutando de mi familia, de mis amigos y de los pequeños detalles que te ofrece la vida, con una mentalidad positiva que tengo presente desde muy pequeña. Como profesional, le dedico toda mi energía a desarrollar Fintonic y mejorar sus servicios y productos, para así ofrecer siempre lo mejor a nuestros usuarios”.  

”Ver crecer” un proyecto es una de las mayores satisfacciones para estas emprendedoras. “Estamos en fase de expansión, el Autocine va cogiendo velocidad y, desde luego, el gran reto es poder extrapolar este modelo de negocio a diferentes ciudades, como Málaga. Estamos en ello, trabajando muy duro para poder llegar a este objetivo y buscando las herramientas necesarias”, explica Cristina.

Belén es un caso especial, pues, como asegura la directora general de IMF Institución Académica, “nunca he dejado de emprender”. “Siempre me ilusiona el crear un nuevo proyecto, especialmente si tiene una base social y puede hacer que el mundo sea mejor. Ahora mismo, estoy ayudando a Ton Pernas a crear Wawaland, un proyecto precioso basado en ropa de niños, dibujos animados, cuentos… Y estamos inmersos en fomentar el carácter emprendedor de las niñas y que quieran tener profesiones STEM, estudiar Big Data… En definitiva, ayudarlas a que quieran labrar su propio destino, como hice yo”. 

Hacer realidad un proyecto propio, gran motivación a la hora de emprender. 

Estas cuatro emprendedoras soñaban con crear su propio proyecto y trabajar por un propósito personal. En definitiva, ser dueñas de su tiempo y poder dirigir el rumbo de sus vidas. “Siempre había trabajado por cuenta ajena, tenía muchas ganas e inquietudes por conocer que era capaz de crear por mí misma y, desde luego, Autocine Madrid RACE fue todo un éxito” explica Cristina Porta.  

Así, sumergirse en un reto o tener la ilusión de hacer algo que ayudara a la gente a hacerle la vida más fácil y cambiar lo establecido es otra de las motivaciones que han llevado a estas mujeres a formar su propio negocio. Es el caso de Lupina, quien encontró en Fintonic esa oportunidad. “A través de este negocio, ayudo a que cualquier usuario tenga acceso a toda su información financiera de forma transparente para poder controlar todo lo relativo a bancos, proveedores, etc., y tomar así las mejores decisiones con su dinero”.    

En el caso de Miriam, una de las motivaciones fue encontrar un nicho de mercado en el telemarketing en 1988. “En España, estaba dando sus primeros pasos. Yo trabajaba en una empresa del sector y, junto a varias compañeras de trabajo, empezamos a plantear la posibilidad de montar algo. De ahí surgió Telco Customer Care”. 

Belén, por su parte, destacaba la importancia de su espíritu emprendedor: “Soy un alma libre y busco la libertad y la independencia, por lo que decido buscar mi propio camino. Cuando hay mucha ilusión por un proyecto, el construirlo tú mismo genera más satisfacción. Tenemos la obligación, como personas y como profesionales, de cambiar la sociedad, no de simplemente adaptarnos al cambio, que es lo fácil. Solo así logramos crear un mundo mejor para todos”.

La COVID-19 afecta también a la conciliación.

Además de la complejidad que supone emprender, la COVID-19 lo ha agudizado, como explica Anna Conte, de Mujer Emprendedora. “La pandemia está afectando a muchas empresas de varios sectores, y especialmente a las mujeres por el tema de la conciliación: cuidado de hijos, de personas mayores de la familia… Es un tema clave en el camino hacia la paridad real entre hombres y mujeres. Y no se trata solamente de establecer, por ejemplo, el mismo número de semanas de permiso cuando se tiene un hijo. Se trata, más bien, de una cuestión cultural, y eso exige tiempo para cambiar los paradigmas”

La conciliación familiar sigue siendo un freno para muchas mujeres a la hora de emprender, si bien los cuatro testimonios recogidos en el ebook que ha publicado IMF Institución Académica muestra cuatro ejemplos de empresarias que han sabido adaptarse a las circunstancias para crear organizaciones de éxito y que sirven de ejemplo a futuras emprendedoras.

Publicidad
Publicidad
Salir de la versión móvil