Atresplayer estrena este domingo el segundo episodio de La cocinera de Castamar. La ficción aterrizó en la plataforma bajo suscripción de Atresmedia el pasado domingo. Y lo hizo con un capítulo en el que se comienzan a vislumbrar los papeles que juegan los habitantes de la Corte. La serie nos presenta una historia ambientada en 1720 cargada de amor, sed de poder, venganza e intrigas. Si la semana pasada charlábamos con Michelle Jenner, en esta ocasión lo hacemos con tres de los actores más destacados del reparto de La cocinera de Castamar: Hugo Silva, María Hervás y Maxi Iglesias.
“Desde dirección fueron muy claros con nosotros. Querían una serie actual, que no estuviera atada a lo que se supone que tiene que ser la época, sin ningún tono extraño o impostado”, explica María Hervás. Para la actriz que interpreta a Amelia Castro, La cocinera de Castamar es una serie dónde “no existe el filtro que a día de hoy nos impone la razón”. “Todo se vive con mucha intensidad: la lucha de poder, el amor, el sexo, la ambición…En esa época nadie se corta al dar rienda suelta a sus emociones”, asegura.
Su personaje, Amelia Castro, está muy influencia por Enrique de Arcona, marqués de Soto. Sin embargo, según ha desvelado la actriz madrileña, a lo largo de la serie veremos cómo cambian las tornas en esta relación. “Ella es un animalillo frágil del que poder aprovecharse con mucha facilidad. Lo que pasa es que luego las cosas cambian, y esa es una de las cosas más interesantes que tiene la serie. Ningún personaje termina como ha empezado. Esta niña tan ingenua y desvalida pasa a convertirse en otra mujer que poco tiene que ver con esa Amelia recién llegada de Cádiz”, asegura.
Como se puede entrever, la relación entre Enrique de Arcona (Hugo Silva) y Amelia Castro será una de las más interesantes y tormentosas de la Corte. El marqués de Soto es un hombre movido por la venganza que pretende tejer contra Diego de Castamar. “Es un personaje con muchísima habilidad dentro de la corte, tiene mucho poder de manipulación y eso es algo muy divertido de hacer”, explica Hugo Silva.
Maxi Iglesias también ha desvelado algunas claves sobre su personaje. “Al principio, Francisco es un tipo disfrutón, aparentemente centrado en pasárselo bien y poco más. Todo esto acompañado por un tono sugerente, atrevido y con un lenguaje muy marcado sexualmente. No necesariamente consecuencia del sexo, también por las cosas que se dicen o las miradas que se establecen entre Sol y Francisco. Es algo que me gusta mucho del personaje, que no se esconde y que mantiene la esencia en cualquier situación”, asegura el actor madrileño.
Así es ‘La cocinera de Castamar’
Madrid, 1720. Clara Belmonte llega a Castamar huyendo de un doloroso pasado para trabajar en la cocina del palacio. La muerte de su padre acusado de traición ha trastocado sus planes de vida y la ha hecho enfermar de agorafobia. La joven se refugia en la cocina para sobrevivir y convierte su trabajo en su gran pasión. En sus platos vuelca sus esperanzas, sus ilusiones y la convicción de que todos seremos iguales cuando todos comamos igual.
En el Palacio, cocina para Diego, Duque de Castamar. Viudo y con un pasado también desolador, al que la llegada de Clara cambia la vida. Poco a poco se dan cuenta de que están enamorados. La diferencia de clases es el principal obstáculo para que puedan estar juntos. Pero no el único. Su madre, Doña Mercedes, empeñada en que el ducado tenga descendencia, trata de que su hijo contraiga matrimonio con la noble Amelia Castro. Para ello, cuenta con la ayuda de Enrique de Arcona, el marqués de Soto. Un hombre que oculta sus verdaderas intenciones y que está dispuesto a lo que sea para lograr su venganza.
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