TRAS EL BLACK FRIDAY Y DE CARA A LA CAMPAÑA DE NAVIDAD

Así podemos proteger y optimizar los datos sin perjudicar la estrategia de marketing

PRNOTICIAS CONVERSA CON JUAN LUIS MORENO, PARTNER & MANAGING DIRECTOR DE THE VALLEY

“Para proteger la información sensible y garantizar la confianza de los consumidores, las empresas están adoptando estrategias proactivas basadas en las mejores prácticas de ciberseguridad y cumplimiento normativo”. Juan Luis Moreno

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Un informe reciente de Salesfore revela que un 54% de los consumidores españoles está dispuesto a usar IA en sus compras y más de la mitad cree que la personalización ofrecida por la IA mejora la experiencia de compra. Esto pasa, entonces, por una recogida de datos cada vez más detallada, y a su vez, por una legislación cada vez más estricta para resguardarlos. Pero, ¿cómo pueden marcas y empresas optimizar tales datos sin perjudicar la estrategia de marketing?

Sobre todo, en campañas como Black Friday y ahora Navidad, los usuarios están más dispuestos a dar sus datos para conseguir mejores ofertas, mientras las empresas aprovechan esta información para transformarla en acciones. Lo que hay es que tener en cuenta todos los elementos para que ambos consigan sus objetivos, sin perjudicar intereses ni estrategias.

En este contexto, Juan Luis Moreno, Partner & Managing Director de The Valley, detalla a los lectores de PRNoticias, cómo lo están haciendo empresas y marcas, y cuáles herramientas, técnicas y estrategias están dando los mejores resultados.

¿De qué manera se están optimizando los datos de los clientes?

    Las marcas están aprovechando sistemas avanzados de análisis de datos e inteligencia artificial para convertir grandes volúmenes de datos en información práctica y estratégica. Esto incluye la implementación de algoritmos de aprendizaje automático capaces de identificar patrones de comportamiento, segmentar audiencias con mayor precisión y anticipar tendencias de compra.

    ¿Podría darnos un ejemplo?

    Un ejemplo destacado es el uso de modelos predictivos que analizan datos históricos de compras y comportamientos online. Estas herramientas permiten prever qué productos serán más demandados, lo que no solo optimiza la gestión del inventario al evitar roturas de stock, sino que también facilita ajustes dinámicos de precios para maximizar los márgenes de beneficios. Además, la personalización en tiempo real está transformando la experiencia del usuario. Herramientas como Dynamic Yield o Adobe Target permiten adaptar sitios web y aplicaciones móviles de forma inmediata, mostrando productos relevantes según la navegación, las compras anteriores o las interacciones previas de cada cliente, mejorando significativamente la experiencia del consumidor y aumentando las posibilidades de conversión.

    ¿En qué lugar quedan las campañas omnicanal?

    Otro avance clave es la implementación de campañas omnicanal, en las que la integración de datos entre entornos físicos y digitales crea experiencias coherentes y fluidas. Por ejemplo, un cliente que explora productos online puede recibir ofertas personalizadas al visitar una tienda física, lo que potencia la fidelización y la conexión con la marca. Finalmente, las marcas están invirtiendo en tecnologías data observability. Estas herramientas permiten monitorear el flujo y la calidad de la información en todas las etapas del ciclo de vida del cliente, asegurando que los datos utilizados sean precisos, actualizados y relevantes para la toma de decisiones estratégicas. Este enfoque integral está redefiniendo la manera en que las empresas interactúan con sus clientes y optimizan sus operaciones.

    ¿Cómo están protegiendo entonces los datos?

    La seguridad de los datos de los clientes se ha convertido en una prioridad absoluta para las marcas, especialmente en momentos de alto tráfico. Para proteger la información sensible y garantizar la confianza de los consumidores, las empresas están adoptando estrategias proactivas basadas en las mejores prácticas de ciberseguridad y cumplimiento normativo.

    ¿Qué medidas se están tomando?

    Una de las principales medidas implementadas es la encriptación avanzada. Tecnologías como el cifrado de extremo a extremo garantizan la protección de los datos tanto en tránsito como en reposo, de modo que incluso si la información es interceptada, no pueda ser descifrada sin las claves correspondientes. Esto añade una capa crítica de seguridad frente a posibles ataques. Otra estrategia cada vez más popular es la adopción de la arquitectura de confianza cero (Zero Trust Architecture). Este enfoque requiere la verificación constante de identidad y permisos para cualquier usuario, dispositivo o sistema que intente acceder a la red. Al eliminar la confianza implícita, se reduce significativamente el riesgo de accesos no autorizados. La monitorización basada en inteligencia artificial también está jugando un papel crucial. Herramientas como CrowdStrike o Splunk utilizan algoritmos avanzados para identificar actividades sospechosas en tiempo real, permitiendo a las empresas detectar y responder a intentos de phishing o ataques dirigidos antes de que ocurran brechas de seguridad.

    ¿Cómo se están cumpliendo las recientes regulaciones en esta materia?

    El cumplimiento regulatorio es otro pilar fundamental. Normativas como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) exigen que las empresas establezcan políticas claras sobre la recopilación, almacenamiento y procesamiento de datos personales. Esto incluye el uso de técnicas como la anonimización o pseudonimización para minimizar riesgos y proteger la privacidad de los usuarios. Además, muchas marcas están dedicando esfuerzos a educar a los consumidores sobre prácticas seguras online. A través de campañas informativas, enseñan a los usuarios a identificar posibles estafas, como correos electrónicos fraudulentos o aplicaciones inseguras. De esta forma, se combina tecnología, cumplimiento y formación para proteger tanto a las empresas como a sus clientes frente a las crecientes amenazas cibernéticas.

    ¿Cuáles herramientas pueden usar los clientes para sacar el máximo partido a las temporadas de descuentos?

    Los consumidores tienen a su disposición un conjunto cada vez más sofisticado de herramientas tecnológicas diseñadas para optimizar sus compras y garantizar que obtienen las mejores ofertas. Estas soluciones no solo ahorran tiempo, sino que también empoderan a los compradores con información clave para tomar decisiones más inteligentes. Entre las herramientas más destacadas se encuentran los comparadores de precios inteligentes, como CamelCamelCamel o Honey. Estas plataformas no solo rastrean precios en tiempo real, sino que también analizan historiales de precios para determinar si un descuento es auténtico o si se trata de una estrategia de “precio inflado previo al descuento”, protegiendo a los consumidores de ofertas engañosas y asegura que obtienen el mejor valor. Otro recurso muy útil son las alertas automatizadas, disponibles en plataformas como Google Shopping, que permiten a los usuarios establecer precios objetivo para productos específicos y recibir notificaciones cuando los precios alcanzan esos niveles. De esta forma, se optimiza tanto el tiempo como los recursos invertidos en la búsqueda de ofertas.

    ¿Podría nombrar algunas?

    El cashback y los programas de puntos de fidelidad están ganando popularidad. Extensiones como Rakuten combinan descuentos con recompensas adicionales, ofreciendo a los usuarios la posibilidad de recuperar un porcentaje de sus gastos en efectivo o acumular puntos canjeables, maximizando el ahorro total. Además, muchos retailers están incorporando chatbots avanzados para mejorar la experiencia de compra. Estos asistentes virtuales ayudan a los consumidores a filtrar ofertas relevantes, resolver dudas sobre disponibilidad o características de los productos, y agilizar el proceso de compra de manera personalizada. Para los usuarios más avanzados, las APIs de comercio electrónico, combinadas con herramientas como Google Colab, abren nuevas posibilidades, ya que estas plataformas permiten analizar datos históricos de precios y predecir tendencias futuras, ofreciendo una ventaja estratégica a quienes buscan optimizar sus compras al máximo.

    La IA en particular, ¿cómo la pueden aplicar las marcas para alcanzar este objetivo?

    La inteligencia artificial se ha consolidado como una herramienta clave, redefiniendo las estrategias comerciales, revolucionando múltiples aspectos del comercio y mejorando tanto la experiencia del consumidor como la eficiencia operativa de las marcas. Su impacto es evidente en diversas áreas prácticas que marcan la diferencia en este periodo de alta demanda.

    ¿Y en el ámbito logístico?

    En el ámbito logístico, la IA está transformando la manera en que se gestiona la cadena de suministro. Algoritmos avanzados son capaces de predecir patrones de demanda con gran precisión, lo que permite a las empresas optimizar la gestión de inventarios y mejorar la eficiencia en los envíos. Gigantes como Amazon emplean modelos de deep learning para ajustar rutas de entrega en tiempo real, lo que reduce significativamente los costos operativos y los tiempos de envío, ofreciendo un servicio más ágil y confiable.

    ¿Y para personalizar los precios?

    Otro aspecto fundamental es la implementación de precios dinámicos. Gracias a la IA, las marcas pueden ajustar sus precios instantáneamente en función de la oferta y la demanda, manteniéndose competitivas en el mercado mientras maximizan sus ingresos. Así, pueden reaccionar rápidamente a los cambios del entorno, asegurando la rentabilidad en un mercado volátil. La personalización también se ha visto impulsada por la IA. A través de técnicas como el filtrado colaborativo y el análisis del comportamiento del usuario, las plataformas de comercio electrónico pueden generar recomendaciones de productos altamente personalizadas. Esto no solo mejora la experiencia de compra, sino que también aumenta las tasas de conversión y la satisfacción del cliente.

    ¿Cómo pueden, unos y otros, prevenir el fraude?

    En términos de seguridad, la inteligencia artificial es una aliada esencial para prevenir el fraude. Mediante la identificación de patrones inusuales en las transacciones, como cambios rápidos en direcciones o métodos de pago sospechosos, la IA protege tanto a las marcas como a los consumidores frente a actividades fraudulentas, aumentando la confianza en el comercio digital. Finalmente, el análisis post-compra está siendo revolucionado por sistemas de IA que procesan grandes volúmenes de datos de transacciones. Estos insights permiten a las marcas diseñar campañas futuras más efectivas, optimizar la segmentación de clientes y aumentar la retención, asegurando relaciones más duraderas y valiosas con los consumidores.

    ¿Cómo pueden los consumidores comprar de forma segura sin comprometer datos sensibles? 

    Para que los consumidores puedan realizar compras de manera segura durante el Black Friday, es esencial que adopten una combinación de medidas tecnológicas y hábitos conscientes que protejan su información personal y financiera. En un entorno donde las transacciones en línea aumentan exponencialmente, estas precauciones son clave para evitar riesgos innecesarios.

    ¿Qué medidas específicas pueden aplicar?

    Una de las primeras medidas es asegurarse de realizar compras únicamente en sitios web con protocolos HTTPS, que garantizan una conexión segura entre el usuario y la plataforma. Es igualmente importante evitar redes Wi-Fi públicas, ya que pueden ser vulnerables a ataques. Para añadir una capa adicional de seguridad, el uso de una red privada virtual (VPN) es altamente recomendable, ya que encripta el tráfico de datos y protege la privacidad del usuario. También es importante evaluar las plataformas donde se realizan las compras. Herramientas como Privacy Badger y Ghostery ayudan a los consumidores a identificar y bloquear prácticas invasivas de rastreo, permitiéndoles tomar decisiones informadas sobre dónde y cómo interactúan en línea.

    ¿Y qué recomienda en cuanto a los métodos de pago?

    En cuanto a los métodos de pago, los servicios como PayPal o las tarjetas virtuales de un solo uso ofrecen una alternativa segura al reducir la exposición de los datos bancarios en cada transacción. Estas opciones minimizan el riesgo en caso de que una plataforma sea comprometida. Asimismo, la gestión proactiva de las cuentas bancarias personales es otra práctica fundamental. Habilitar la autenticación en dos pasos (2FA) añade una barrera extra contra accesos no autorizados. Además, los usuarios deben revisar regularmente las actividades de sus cuentas banca para detectar cualquier movimiento sospechoso de forma temprana.

    ¿Alguna recomendación más para los consumidores, y las marcas?

    Los consumidores deben ser conscientes sobre las técnicas de ingeniería social, como el phishing, y estar atentos a correos electrónicos, mensajes o llamadas sospechosas que intenten obtener información confidencial bajo falsas pretensiones. Reconocer estas tácticas y evitarlas puede prevenir graves riesgos de seguridad. Por último, la educación digital desempeña un papel crucial. Comprender la importancia de proteger los datos personales no solo durante eventos importantes, sino en todas las interacciones online, es una habilidad esencial en el mundo digital actual. Fomentar una cultura de ciberseguridad empodera a los consumidores para navegar por la red de manera más segura y confiada.

    Seguiremos Informando…

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