RECUPERAR LA CREDIBILIDAD DE LA COMPAÑÍA

La crisis reputacional de RENFE sigue mientras se produce un cambio en su dirección

LA DIMISIÓN DE RAÚL BLANCO SE HARÁ EFECTIVA MAÑANA

La salida de Raül Blanco se produce en un momento crítico para Renfe, que enfrenta una crisis reputacional y política debido a los problemas operativos y las tensiones internas

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Raúl Blanco, presidente de Renfe, anunció su dimisión la semana pasada alegando “motivos personales” y su intención de enfocarse en el sector privado. Se espera que el Consejo de Ministros nombre a Álvaro Fernández Heredia, actual secretario general de Movilidad Sostenible y uno de los hombres de confianza de Óscar Puente, como su sustituto.

Se salida se produce en un momento crítico para Renfe, que enfrenta una crisis reputacional y política debido a los problemas operativos y las tensiones internas. El nombramiento de un nuevo presidente será clave para definir si la compañía logra superar estos desafíos y fortalecer su posición en el sector ferroviario.

Su gestión, que comenzó en febrero de 2023, ha estado marcada por una serie de desafíos significativos. Aunque logró reducir las pérdidas de la compañía de 123,4 millones de euros en 2023 a aproximadamente 20 millones en 2024, y aumentó el EBITDA en un 28%, su mandato también enfrentó problemas técnicos y operativos que afectaron la reputación de Renfe.

Uno de los incidentes más destacados fue la paralización completa de la flota de trenes Talgo Avril el 1 de enero de 2025, debido a un fallo en el software que impidió el reconocimiento del cambio de año. Este suceso se sumó a una serie de problemas técnicos que generaron tensiones entre Renfe y Talgo, y encendieron las alarmas en el Ministerio de Transportes.

El nuevo presidente deberá encargarse también de la batalla legal que Renfe pretende abrir en Europa contra las prácticas de la Administración gala y del gigante ferroviario estatal SNCF tanto en el mercado propio como en el propio mercado español.

Además, fuentes internas señalaron que la relación entre Blanco y su ‘número dos’, Óscar Gómez, director general de Negocios y Operaciones desde enero de 2024, se deterioró significativamente, marcada por la desconfianza y tensiones internas que afectaron la eficiencia de la empresa.

En este contexto, el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha expresado su intención de transformar Renfe en una gestora internacional comparable a Aena, enfatizando la necesidad de un cambio en la gestión para lograr mayor eficiencia y expansión.

Así, el reto del nuevo presidente será no solo recuperar la credibilidad de la compañía, sino también demostrar que Renfe puede superar las adversidades, implementar una gestión más eficiente y proyectarse hacia el mercado internacional con una reputación fortalecida.

Seguiremos Comunicando…

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