Agosto comenzó caliente, no solamente en los termómetros, también en la opinión pública, especialmente en la de los vecinos de Paiporta –el municipio más afectado por la DANA– que han visto cómo su nuevo Gobierno municipal, conformado por un acuerdo de coalición entre el PSOE y Compromís tras la dimisión de la alcaldesa Maribel Albalat por razones de salud, se aumentó el sueldo, elevando el gasto anual en aproximadamente medio millón euros, hasta 2027. “Pacto de sueldazo” lo han llamado algunos. Otros, “la cara de la desvergüenza”.
Se supo porque el Partido Popular lo denunció: el pacto implica un incremento del gasto en personal de confianza que alcanzará los 260.000 euros al año, con retribuciones mensuales que llegan a los 3.000 euros y aumentos salariales que, en algunos casos, rozan el 75 %. Todo esto sucede en una localidad aún afectada por las secuelas de una catástrofe natural y con múltiples necesidades pendientes de atención.
Y como si no fuese suficiente el vaporón que la noticia ha causado, de los mismos autores, acaba de llegar el “Despilfarro del conciertazo”, o lo que es lo mismo, el dineral que pagaron estas mismas autoridades municipales al grupo que la noche del pasado 22 de agosto amenizaron las Fiestas de Sant Roc 2025: unos 30.000 euros para La Fúmiga, cuyo caché ha aumentado, tanto como su popularidad en los últimos años.
Es verdad, los vecinos no tenían que pagar para verlos en el recinto ferial de Paiporta, pero porque ya lo habían pagado desde las arcas municipales. Cobrar entrada hubiese sido “pagar dos veces”. El grupo es bueno, pero no para tanto. Lo que sí es para tanto, es que lo “vendieran” como un momento de recuperación colectiva tras la DANA en un ambiente de esperanza y unión entre vecinos, y terminara siendo un concierto en contra de Carlos Mazón. A los autores del “Pacto del sueldazo” les ha salido barato. De momento.
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