Los expertos advierten de la necesidad de informar a los médicos y a la población sobre la narcolepsia, un trastorno del sueño crónico, de base genética y difícil diagnóstico que afecta a unas 30.000 personas en España y tarda una media de 10 años en diagnosticarse.
Por este motivo, los médicos han defendido durante la XVII Reunión Anual de la Sociedad Española del Sueño, la tancia de definir límites diagnósticos más precisos para que la enfermedad pueda tratarse a tiempo y de este modo reducir ‘el deterioro social y laboral que sufren los pacientes'.
Junto a la necesidad de un diagnóstico precoz para reducir el pacto negativo de la narcolepsia en la calidad de vida de los pacientes, los expertos han insistido en que con los medicamentos actuales y algunas estrategias relacionadas con una mejor planificación del sueño es posible lograr un control adecuado de los síntomas.
Para la coordinadora del Servicio de Psiquiatría y corresponsable del Centro de Medicina del Sueño del Hospital Universitario Son Dureta (Palma de Mallorca), Francesca Cañellas, los límites diagnósticos de la narcolepsia son difíciles de delitar en algunas ocasiones en la práctica clínica diaria.
Además, ha apuntado que otros requieren exploraciones complementarias muy específicas que se realizan exclusivamente en centros muy especializados y no se solicitan si no se sospecha la enfermedad. En muchas ocasiones, los síntomas de la narcolepsia se confunden con otros trastornos de tipo neurológico o psiquiátrico como la depresión, la hipersomnia psiquiátrica o la epilepsia e incluso en ocasiones el exceso de sueño se confunde con los efectos secundarios de los medicamentos'.
El síntoma más frecuente de la narcolepsia es la somnolencia diurna incontrolable que lleva a crisis de sueño. El más típico es la pérdida repentina del tono muscular o cataplexia que suele estar provocada emociones, especialmente la risa. Aunque la causa de la patología permanece desconocida, los descubrientos de los últos años han permitido que cada vez se sepa más sobre los mecanismos genéticos y ambientales que pueden desencadenarla.
A pesar de que es poco frecuente, la narcolepsia es un trastorno que conlleva un significativo deterioro de la vida social y laboral del paciente, comparable con el que afecta a los enfermos epilépticos. Algunos estudios sobre el pacto de la enfermedad en la calidad de vida del paciente concluyen que el 30 ciento de los pacientes con narcolepsia sufren accidentes laborales y otro 30 ciento pierde su puesto de trabajo.