El pleno del Parlamento Europeo ha dado su visto bueno al Euro VI, reglamento que reducirá los lites de las emisiones contaminantes de camiones y autobuses.
Sin embargo, los fabricantes tendrán hasta el 2012 para adaptar los vehículos nuevos a dicha legislación, que también facilitará el acceso a la información de reparación y manteniento. Los Estados miembros ofrecerán incentivos financieros para acelerar la entrada en el mercado de vehículos que cumplen los nuevos criterios.
Los requisitos de Euro VI para los vehículos pesados de más de 2.610 kilos buscan dar continuidad a los límites plantados la norma Euro V, que se aplica desde el 1 de octubre de este año.
El acuerdo respalda la propuesta de la Comisión Europea de poner unos límites más estrictos para las emisiones de varias partículas contaminantes y los óxidos de nitrógeno (NOx) de los vehículos. Por ejemplo, el tope para los NOx será de 400 mg/kWh (un 80% menos que en el Euro V) y el límite para la masa de materia particulada será de 10 mg/kWh, lo que supone una reducción del 66% con respecto al Euro V.
La Comisión está llamada a especificar, en caso necesario, además de los topes para los óxidos de nitrógeno (NOx) un límite específico para el dióxido de nitrógeno (NO2). Si el Ejecutivo europeo considera que es preciso regular las emisiones de otras sustancias contaminantes tendrá que presentar una propuesta al Parlamento y al Consejo.
