LOS DIARIOS DE VOCENTO INCREMENTAN SUS INGRESOS UN 6,3%

Vocento, inmerso en una crisis con sus trabajadores tras publicar sus resultados

LA PLANTILLA, EN PIE DE GUERRA CONTRA LA DIRECCIÓN DEL GRUPO

Los últimos resultados económicos abren una guerra entre la dirección y la plantilla de Vocento

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Las aguas están revueltas en Vocento. El malestar que inunda la redacción de ABC, que sigue reclamando mejoras salariales después de años de precariedad laboral, se ha visto incentivado después de que la pasada semana, el grupo que lidera Luis Enríquez presentase los resultados económicos del primer trimestre.

A pesar de que el grupo presentó pérdidas superiores a los nueve millones de euros, sus ingresos se han visto incrementados también en más de nueve millones de euros. Desde el grupo pueden presumir de los más de 48 millones de euros que le han reportado sus diarios regionales en el primer trimestre, o los más de 18 millones de euros que han ingresado gracias a ABC.

El talón de Aquiles del área de prensa llega desde Relevo, que solo les reporta unos ingresos de 269.000 euros y los suplementos y revistas que suman tres millones de euros, cerca de un 10% menos de lo que ingresaron en el primer trimestre del año pasado.

Los suscriptores digitales aumentan y descienden las ventas en quioscos

Si hablamos del avance en los lectores de ABC, el balance es positivo en cuanto a suscripciones digitales, que ascienden a 41.000, más de la mitad de los 81.000 que recogen los regionales del grupo. En el caso de las ventas en quioscos, el grupo también refleja un descenso del 14,6% de las ventas, según la OJD en el primer trimestre del año.

Ante estos números, la dirección de Vocento, encabezada por Luis Enríquez, ha propuesto a la redacción de ABC reducir la jornada semanal a 4 días, con su correspondiente bajada de sueldo, algo que ha acabado con la paciencia de la plantilla.

Desde la plantilla de ABC ha incrementado su malestar, tal y como ya ha publicado este periódico, después de la última propuesta de sus directivos. Aseguran que la reducción de jornada, no sólo no acaba con los problemas que llevan sufriendo años, si no que incrementa su malestar. Entienden que la dirección se recochinea de sus trabajadores y, además de no solucionar el problema, las condiciones laborales de los que no acepten la reducción de jornada serán peores, ya que tendrán que asumir el trabajo de todos aquellos que sí se sumen a la propuesta.

Seguiremos Informando…  

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