Es conocida por todos la reciente denuncia que el Gobierno ha realizado en todos los foros contra los denominados ‘pseudomedios’, un fenómeno preocupante que se basa en la proliferación de plataformas que se disfrazan de sitios periodísticos, difunden desinformación o contenido sesgado, contribuyendo a la confusión y a la polarización social.
Así, en un contexto en el que la verdad, debido al nacimiento de las redes sociales, se vuelve cada vez más difícil de discernir, los ‘pseudomedios’ se convierten en una amenaza más para el debate público informado y para la calidad democrática.
El caso más reciente: “Lo que hemos encontrado de Sánchez en República Dominicana es demoledor”
El último caso que demuestra el problema de difundir ‘información’ no contrastada y por tanto, sin rigor periodístico, es la denuncia realizada por el periodista Albert Castillón, que sin pruebas denuncia al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez de actividades de evasión fiscal en República Dominicana. Una denuncia que, si fuera cierta, podría costar la presidencia a Sánchez, pero de momento no pasa ni de rumor.
Según afirma ‘esdiario’, la denuncia realizada por Castillón se basa en un “supuesto” informe realizado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, del que se desconoce la información concreta y del que tampoco se sabe si verá o no la luz. En ese informe que recogería los presuntos delitos de Pedro Sánchez, que según Castillón “podrían ser de evasión fiscal, podrían ser por blanqueo de capitales”, trabaja sin descanso la UCO, que además se está encontrando con varios problemas a la hora de investigar, afirma el periodista.
Añadiendo que, “se trata de un informe que estaría apuntando directamente a Pedro Sánchez y a Begoña Gómez, pero del que se desconoce la información, ya que la UCO no hará público este informe, hasta que lo tengan totalmente cerrado y atado, porque “se están jugando su propia supervivencia” “.
Palabras que de lejos huelen a humo y que demuestran, una vez más, el daño que las informaciones no contrastadas pueden causar a la reputación e imagen de profesionales y compañías, al verse mencionadas en ‘pseudomedios’ o en medios que sin darse cuenta recogen informaciones falsas de este tipo de fuentes, o charcos, que también tienen agua.
Para enfrentar este problema, es necesario un esfuerzo conjunto entre gobiernos, plataformas digitales, medios de comunicación y ciudadanos. La clave está en fomentar la alfabetización mediática, promover la verificación de hechos y crear mecanismos que limiten la influencia de estas plataformas en la opinión pública.
Seguiremos informando…