El pasado mes de julio, sin esperarlo y sorpresa, Alberto Granados, presentador de ‘A Vivir Madrid’, era despedido de la Cadena SER. La noticia caía como un jarro de agua sobre el locutor y sus fieles oyentes. Hoy habla con prnoticias de su pasado, presente y futuro.
¿Cómo han sido estos años en la Cadena SER?
Maravillosos, para mí fue cumplir un sueño, pasar de oyente a formar parte de la empresa, además me han permitido hacer un montón de cosas muy diferentes. Desde hace mucho tiempo, que empezaron a confiar en mí, y a dejar que estuviera en antena, ha sido bastante bueno. Quizá, como en todos los trabajos, tuve un momento de esplendor, cuando prácticamente lo presentaba todo, y desde hace un par de años ha ido un poco peor, pero la radio lo que tiene es que es así: en algunos momentos parece que eres prescindible para todo y en otros no, como siempre dependemos no de los oyentes, sino de los despachos, de hecho mi programa no dejaba de subir audiencia, temada tras temada.
¿Por qué se produce tu salida de la SER?
Todavía no lo tengo muy claro. Según me contaron que necesitaban poner otra pieza en mi lugar y en ese momento ya no había sitio para mí. Es la única información que he tenido puesto que conmigo ni ha hablado mi director de programas, ni ha hablado nadie, la única información que tengo es la que me dieron en un despacho de recursos humanos.
¿Quieres seguir en radio o te planteas otras opciones?
Yo lo bueno que he tenido es que siempre he estado haciendo cosas bastantes diferentes, aparte de estar haciendo radio, he hecho televisión, he colaborado en revistas, escribo… Lo que más me gusta es la radio, y es la ocupación que sí que me gustaría tener, pero como siempre compaginándola con otras cosas. Sigo escribiendo y haciendo cosas diferentes.
¿Qué planes de futuro tienes?
De momento ver cómo está el panorama de la radio. El problema que he tenido es que, al haber dejado la SER a preros de agosto, las programaciones de todas las cadenas ya estaban cerradas. En radio no es como en televisión, en televisión se producen bajas casi automáticas dependiendo de cómo vayan las audiencias, en la radio normalmente se apuesta más a largo plazo las personas, con lo cual me agino que esta temada, hasta verano, va a ser bastante complicado, pero voy a hacer todo lo posible para regresar lo antes posible. Lo malo que tenemos los periodistas, y más los que nos dedicamos a la radio y a los medios de comunicación, es que en cuanto dejas de estar presente un par de meses o tres la gente se va olvidando de ti.
¿Cuál es el secreto de tu éxito para tener tantos seguidores?
Convertir al oyente en familia ha sido una de nuestras ventajas. Hemos ido un poco al margen de todo lo que ocurría a nuestro alrededor, en nuestro programa hemos intentado siempre estar al margen de la política y procurar que el espacio fuera una ventana al divertento, a olvidar los problemas, a la cultura y ese ha sido nuestro gran acierto. Por otro lado, convertir al oyente casi en familia, hacerle un poco partícipe de tu juego y que se considere casi como uno más del programa. Conseguos convertir el estudio de la SER casi en el salón de casa y cada invitado pasaba a convertirse en amigo, ese ha sido el gran secreto.
¿No crees que la Cadena SER se arrepentirá de tu salida tras el apoyo de tus oyentes?
Generalmente los directivos cuando toman una decisión van con ella hasta la muerte. Hemos tenido muchísos casos y, a pesar de que se hayan equivocado y hayan hecho las cosas mal, han seguido en sus trece y va a ser complicado. Pero no me he ido de mal rollo de mi casa, yo la sigo considerando mi casa, y los directivos llegan y se van, y he visto muchos directores de programas y directores pasar a lo largo de mi carrera, y a muchos compañeros que han salido y que luego un tiempo después han regresado. Creo que las puertas no las tengo cerradas y tampoco descarto en algún momento poder volver otra vez.
Los formatos que tú explotabas son tuyos o pertenecen a la Cadena SER, ¿podrías versionarlos?
Los programas cuando uno los va conformando, a pesar de que sean de la casa, uno se queda con ese trabajo que al final sale de tu aginación, de tu saber estar. Al fin y al cabo, en la radio, casi todos los formatos son muy parecidos, bastante silares unos con otros, pero lo que distingue en la radio es la personalidad de la voz que luego lo presenta. Yo he tenido muchas ocasiones de hacer algunos programas que han hecho otros compañeros, o incluso de gente que me haya sustituido, y ese mismo programa, otra persona, al final es un programa totalmente diferente. La personalidad de cada uno es lo que hace que verdaderamente cualquier programa en seguida parezca que es tuyo desde siempre.
¿Volverás a ‘Cuarto Milenio’?
Fue una aventura que hice en su momento, que terminó que yo andaba con muchos proyectos y no podía compaginarlos. Ahí se quedó, es una etapa que quedó cerrada y no creo que se vaya a repetir, va a ser bastante difícil.
Seguiremos Informando…