CARACAS (13/10/04) El presidente venezolano quiere poner en marcha una polémica Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión. Los periodistas y la oposición han encendido las alarmas lo que consideran el fin de la libertad.
CARACAS (13/10/04) El presidente venezolano quiere poner en marcha una polémica Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión. Como es lógico los periodistas y la oposición han encendido las alarmas lo que consideran una ley mordaza que pondrá fin a las pocas libertades de información que quedan en el país.
La famosa ley ya ha llegado al Parlamento venezolano donde su discusión ha provocado que dos diputados terminaran a puñetazos en el podio de la presidencia parlamentaria ante las cámaras de televisión.
El debate no tiene desperdicio, y no sólo dentro del parlamento, sino también en la calle, y particularmente en los medios de comunicación privados, la mayoría contrarios a Hugo Chávez, hasta el punto de que el gobierno los acusa de “capitanear” a la oposición y de haberse convertido en partidos políticos.
Sobre el papel la ley busca preservar a la población infantil, incentivar la producción audiovisual nacional y mejorar la calidad de la radio y la televisión, algo en lo que, en principio, parecen todos de acuerdo.
Sin embargo, en lo que no hay consenso es en los métodos para lograrlo: distribución de contenidos según horarios, cupos mínos de producción nacional y tutelaje de esas productoras desde el Ministerio de Información y Comunicación, entre otros.
El ministro de Comunicación e Información, Andrés Izarra, ha asegurado que la Ley no busca amordazar, sino definir lo que llama “cuatro ejes” comunicacionales: respeto el televidente, los horarios, creación de grupos de supervisión y fomento de una industria comunicacional acorde al “modelo de cambio que vive el país“.