La patronal de la industria farmacéutica, Farmaindustria, mostró ayer su decepción las últas medidas adoptadas de forma unilateral y sorpresiva el ministerio de Sanidad, al tiempo que pidió diálogo a la ministra Elena Salgado.
Esta ha sido la postura manifestada la Asamblea General Extraordinaria, celebrada hoy en Madrid, y en la que el presidente de Pfizer España, Emilio Moraleda, fue elegido nuevo presidente de Farmaindustria, en sustitución de Jorge Gallardo, presidente de Almirall.
Al término de la misma y en declaraciones a los medios, Moraleda dijo que esta misma tarde llamaría a la ministra Salgado para ver si fijan un calendario de encuentros al objeto de encontrar “puntos de encuentro” y “acuerdos globales” que permitan compatibilizar el gasto farmacéutico con la sostenibilidad del sistema de salud y el desarrollo de la industria.
La Asamblea ratificó la propuesta del Consejo de Farmaindustria de solicitar la retirada de la ley de Presupuestos, en la que se contempla el nuevo sistema que Sanidad quiere poner a la industria farmacéutica para financiar la investigación, mediante el cobro de una tasa que iría en función del centaje de ventas.
(Sanidad ha calculado que con esta tasa se recaudarían 200 millones de euros. Esta cifra dobla la contribución de Farmaindustria de los últos años en I+D (Investigación más Desarrollo), según afirmó Moraleda).
A cambio de esta retirada, Farmaindustria ha propuesto seguir colaborando en la financiación de la investigación pública y de la formación médica, “sin poner en riesgo las redes de I+D” ya creadas y “abriendo una línea de apoyo al uso racional del medicamento”.
En relación a los precios de referencia, la Asamblea general ha decidido solicitar la paralización del Proyecto de Orden actualmente en tramitación y la modificación del actual sistema y ha propuesto a cambio buscar una fórmula que, “respetando la filosofía de esta medida“, module los pactos individuales y genere los ahorros que se esperan del sistema.
Asismo la Asamblea hizo hincapié en la necesidad de que el sector colabore y participe en el diseño del Plan Estratégico farmacéutico que está elaborando el ministerio de Sanidad.
En sus declaraciones a los medios, el nuevo presidente reiteró que entienden la necesidad de moderar el gasto farmacéutico pero insistió en que quieren establecer un diálogo “integral y no parcelas” en todos los temas pendientes, como es también el de la financiación selectiva de los medicamentos.
Sobre este últo asunto dijo que tal y como se está planteando podría tener efectos “devastadores” para la industria, aunque reconoció que todas las informaciones que tenían al respecto eran oficiosas. También aludió Moraleda al asunto de la regulación de la visita médica parte de los representantes farmacéuticos e indicó que lo ideal sería que hubiera una sola fórmula para las 17 comunidades Autónomas.
El presidente saliente Jorge Gallardo, indicó su parte que en la industria farmacéutica son “pragmáticos” y lo tanto les interesa llegar a acuerdos y entablar un diálogo global con Sanidad para saber qué medidas va a tomar y poder explicar que algunas de estas medidas pueden tener consecuencias graves para el empleo, la inversión e innovación.
Gallardo defendió últo la idea de que otros agentes sanitarios participen también en la reducción del gasto farmacéutico. Entre estos agentes señaló a las propias comunidades autónomas, de las que recordó no todas tienen el mismo creciento del gasto, y también, dijo, está la distribución y la manufactura y los médicos.
