Iberdrola ha acordado desarrollar un proyecto inmobiliario en Cabo Cope (Murcia) con Caja Murcia y Bancaja, al que en los próxos días se sumará Caja CastillaLa Mancha.
Este proyecto, que previsiblemente dará origen a la creación de una sociedad conjunta, se ha materializado tras la venta del 100% de un terreno de Iberdrola, de 328,3 hectáreas, a APEX.
La inmobiliaria del Grupo ha vendido, a su vez, un 40% de dicho terreno a Bancaja y Caja Murcia un te de 36 millones de euros, que se anotarán en la cuenta de resultados de Iberdrola de los nueve preros meses de este año. Caja CastillaLa Mancha negocia su incoración al proyecto.
La operación se enmarca en el proyecto Marina de Cope, ubicado en los municipios de Águilas y Lorca e incluido en el Plan de Ordenación Territorial del Litoral de la Región de Murcia. El objetivo de Iberdrola y de sus socios financieros es colaborar en todo lo posible con las autoridades regionales y locales en el desarrollo global del proyecto, que se convertirá en uno de los más representativos e tantes de la zona desde el punto de vista del turismo de calidad.
La finalidad de esta actuación, que abarcará en su conjunto 2.100 hectáreas divididas en cinco sectores, radica en la puesta en valor turístico del litoral sur occidental de la Región de Murcia, siguiendo un modelo de desarrollo de calidad y sostenible. Para ello, contará con una marina, cinco campos de golf, una zona residencial con 10.000 viviendas y equipamientos turísticos con 22.000 plazas.
Entre las numerosas ofertas recibidas, Iberdrola ha elegido a sus socios financieros para llevar a cabo este proyecto inmobiliario, lo que se enmarca en su permanente interés de colaboración en diversos proyectos realizados en las zonas donde desarrollan su actividad.
Cumpliento del plan de desinversiones
Con esta operación, IBERDROLA ya ha realizado desinversiones de activos te de 4.000 millones de euros, una cantidad un 33% superior a los 3.000 millones de euros programados inicialmente en el Plan estratégico 20022006. De este modo, la Compañía ha superado ampliamente sus objetivos a este respecto en el tercer aniversario del citado Plan.
En esta cifra se incluye la venta de activos de gas de Brasil y Colombia, propiedades inmobiliarias, subestaciones, negocios no energéticos y la titulización del déficit tarifario. Además, abarca la venta del negocio de agua, de la red de transte y de las participaciones en Telefónica, Repsol YPF y Galp.
La finalidad del plan de desinversiones era concentrar recursos en el negocio tradicional, aumentar la fortaleza financiera y reducir la deuda. Precisamente, Iberdrola prevé culminar el presente ejercicio con un apalancamiento del 55,1%, a lo que se suma una tante contención de costes, todo ello a pesar de las elevadas inversiones de 10.200 millones de euros realizadas previstos para el periodo, lo que representa el 85% del total muy superior a la prevista, gracias a la mayor eficiencia en recursos humanos y operativa.